La Vía Láctea y la bioluminiscencia del agua en una misma imagen



Conseguir buenas fotografías de la Vía Láctea es una tarea difícil en sí misma, pero el fotógrafo Ricardo Ghion decidió ponerse un desafío adicional durante su más reciente sesión de fotos: capturar una vista clara del cielo y la  bioluminiscencia del agua a sus pies en una sola imagen. Esto requirió mucha planeación y una configuración complicada, pero los resultados valieron la pena.

Las fotos fueron tomadas en Cananeia, una ciudad en la costa sur de São Paulo, en Brasil. Por muchos años, Ghion había escuchado a los habitantes de la zona hablar sobre la luminiscencia del agua en ese lugar, pero no había podido verla con sus propios ojos. Eso cambió cuando un día decidió tomar fotos de la Vía Láctea y notó que el agua brillaba con el movimiento de los delfines. En ese momento, decidió capturar lo que vio con su cámara.


Ghion se dirigió a un área donde los pescadores dejan sus botes en marinas artificiales. Para asegurar la visibilidad del brillo del agua, Ghion tenía que producir la toma cuidadosamente. Por lo general, los humanos pueden ver la bioluminiscencia en el agua cuando hay floraciones de algas de plancton. A medida que se mueve el agua, el increíble brillo azul hace su aparición. Sin embargo, se necesitan ciertas condiciones para poder ver la bioluminiscencia en todo su esplendor.



Además que se necesita absoluta oscuridad y que no haya contaminación lumínica, el agua también debe estar cálida y la noche debe ser fría. Aunque los manglares son una locación pintoresca para estas fotografías, hubo mucho trabajo detrás de esta sesión para que todo saliera bien.

“Para tomar la foto, tuve que meterme en el agua hasta la cintura con la cámara para obtener una composición más agradable”, Ghion le dice a My Modern Met. “El agua estaba caliente, pero la noche era fría y todo estaba en completa oscuridad. Podías escuchar a los delfines respirando a unos metros de distancia”.



Con la cámara en la posición correcta, el fotógrafo tenía llevar a cabo múltiples tareas. “La bioluminiscencia ocurre cuando el agua está agitada, y como no había viento esa noche, tuve que programar el obturador con un temporizador y con la otra mano arrojar agua hacia arriba, ¡todo con cuidado para no dejar caer todo en los manglares!”

La tenacidad de Ghion dio como resultado una serie de fotografías increíbles. “Espero que las personas se sientan vivas cuando vean mis fotos y que sientan y puedan tener respeto por la naturaleza”.





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