Al leer esta pregunta, muchos se habrán hecho otra: ¿Ah, pero se puede? Y quizá una más: ¿Y para qué? Pues se puede, sí. Y en cuanto al para qué, pues baste con pensar en aquellos diseñadores de páginas web que trabajan con el sistema operativo de código abierto. Ahora veamos cómo: hace falta tener instalado Wine, una aplicación que permite ejecutar programas de Windows… sin tener instalado Windows. Y ahí llega Ies4linux, un sencillo ejecutable que permite instalar las versiones 6, 5.5 y 5 del navegador de Microsoft, en 29 lenguajes distintos. Una vez sabido esto, se puede entrar en la interesante discusión sobre si es legal instalar un programa de Microsoft fuera de su entorno operativo, o sobre si basta con el ‘disclaimer’ que hace Ies4linux, que advierte al usuario de que debe poseer una licencia válida del navegador. De momento los de Redmond no dicen nada, así que parece que no se van a echar al cuello de nadie por probar el hibridaje. Y hablando de navegadores: ya está en la calle la versión Beta (en pruebas) de Firefox 2.0.

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