Es muy complicado sintentizar en palabras todo lo acontecido en esta kedada. Me he traído un sabor de boca inmejorable, y mi madre, mamagale, también. Hemos podido disfrutar de todo tipo de encantadores paisajes, Naturaleza en impresionante buen estado de conservación, paraíso para los buitres y otras especies, el buen yantar (jamones pata negra y magníficos quesos...), el Valle del Jerte con sus millones de cerezos en flor, buena compañía... No se podría pedir más. Envidio a Rain (Juan Pablo) por las raíces que tiene en esa tierra y que no me ha defraudado nada en absoluto. Llevaba muchos años queriendo visitar esta tierra, y las alabanzas que le son concedidas en innumerables documentales de TV son totalmente merecidos.
Para mi madre y para mi, todo comenzó el viernes nada más salir del trabajo. Fue entonces cuando pusimos rumbo a Extremadura. Y no tardaron en llegar las primeras sorpresas en unas jornadas caracterizadas por el 'buen tiempo' de la mano de la DANA perpetua
Íbamos por la A92 y, tras algunos chaparrones, la temperatura comenzaba a bajar escandalosamente, según subíamos por la Sierra Tejeda (si no me equivoco)... de 15ºC pasábamos a 10ºC y seguía bajando... 9, 8, 7, 6... yo le decía a mi madre "¿A que somos capaces de encontrar nieve y todo?" Estaba flipando... 5, 4, 3... y comenzaba a nevar... todo nevado, la autovía con nieve, la Guardia Civil de Tráfico, y primeros accidentes por alcance... Estaba flipando! El reloj me daba 800 m. de altitud y estaba nevando, a poco rato de Málaga capital !!! De todo estoy hay fotos, pero que pondré en un reportaje a parte.
Llegamos al punto de destino, la casa rural en el término municipal de Torrejoncillo (Cáceres) a las 21.30 más o menos, tras 6.30 h. de viaje. No fue complicado encontrarnos con Rain, Maite y Hanibal... Eso sí, estábamos hechos polvo. Una ducha y a dormir
Al día siguiente comenzó la preciosa aventura, propiamente dicha. Íbamos a visitar el Parque Nacional de Monfragüe, y para ello tuvimos que desplazarnos primero hasta el pueblecito de Villareal de San Carlos, de donde partía la ruta que hicimos, que fue la de Cerro Gimio, hasta el gran Mirador desde el cual se ve el castillo de Monfragüe, que visitaríamos por la tarde. Por partes.
Primero nos acercamos al Centro de Interpretación, que estaba muy bien montado, muy curioso, con sonidos naturales en el ambiente. Después comenzamos a caminar debidamente equipados. No tardamos mucho en empezar a hacer fotos, ya que la Naturaleza estaba rebosante de vida. Corríamos riesgo de encontrar muchos visitantes, pero acertamos yendo lo más pronto posible.
Al rato de caminar, por fin empezamos a tener unas magníficas vistas de un embalse que se encuentra a los pies del Castillo de Monfragüe y que recoge las aguas del Tajo.
La vegetación en esa zona era densísima, aunque la planta más abundante era la Jara. Y casi no había una flor de Jara que no tuviera una
Apis melifera dentro
.
Cruzamos un jodido arroyo que no llevaba ni una put* gota de agua :DDD
Y hablando del rey (o reina en este caso
) de Roma, hela aquí...
Y por fin, estábamos llegando casi al Mirador de Cerro Gimio, que tiene una choza arriba del todo para contemplar el paisaje y los abundantes buitres que hay en la zona (yo la llamaría el paraíso del buitre), y desde allí se veía el río Tajo y el embalse que lo regula. Debajo de la "i" de información que he puesto en la foto está el Castillo de Monfragüe, que visitaríamos por la tarde. Tengo fotos del mirador, pero tenía que quitar peso fotográfico al resumen...
El Tajo y sus meandros a modo de omega invertida...
Después, volvimos hasta Villareal de San Carlos, el punto de partida, por otro sendero, y nos fuimos a comer a Torrejón el Rubio. Allí Rain, Maite y Gustavo pudieron degustar un jodido cocido que era como beberse un cerdo ¿no, Gus?
Y ya por la tarde, y aún haciendo la digestión, subimos al Castillo de Monfragüe. Siempre hablando por los codos, de muchas cosas, incluído Vigorro evil El cielo se había nublado y se estaba comenzando a inundar de majestuosos buitres, ya que tienen las buitreras en el roquedo magnífico que hay debajo del castillo. Estaba a tope de gente con lentes para observar estas aves.
Se puede subir arriba del todo del castillo, tras unos 140 escalones para subir a éste, y otros 15 o así por su interior, que recorren una angosta y oscura galería, haciendo del momento toda una hazaña
Desde allí pude hacer
las mejores fotos de buitres de toda mi vida Las vistas de la dehesa desde allí eran increíbles...
Ahora, ¿adivináis qué es lo de la foto?
Es el Mirador de Cerro Gimio, desde donde por la mañana hice las fotos hacia el Castillo...
El Cañón 75-300 haciendo de las suyas evil Estaba lleno de gente, que se puede observar nítidamente haciendo ampliación de la foto original.
Foto de grupo, sin Gus...
Y después, bajando del Castillo (todo el mundo mirando a los escalones
):
Ahora volvamos con los buitres... Comienza el espectáculo... Nunca antes había podido observar a los buitres tan de cerca, y me sorprendió lo acostumbrados que están a la presencia humana pues, a pesar de la riada de gente que había, ellos hacían vida aparentemente normal, trayendo incluso carroña a sus polluelos, como se puede ver en la siguiente colección de fotos, con las aves 'cazadas' en vuelo, aterrizando, posadas en las buitreras...
Después de tan bello espectáculo, vamos en busca del coche... Caminante, caminando se hace el camino...
Tierra de alcornoques que dan buen corcho... y que menudo juego dieron... En reportajes de Maite, Gus o Rain veréis que Tarzán de los Monos andaba por allí también :DDD :DDD
Maite, jodidamente agachada de forma muy sospechosa........... ¿Qué estabas haciendo, Maite?
Y a última hora, ya de vuelta en la casa rural, aspecto del cielo, muy amenzador........
A cenaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaarrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr !!!!
Y hasta aquí, la primera parte del reportaje. Me quedan muchas fotos que poner aún, así que no quiero agobiar con mucho tocho. Mañana el resto!