Un poco precipitado, pero el domingo 09-11-2008 nos dispusimos a subir el pico Maroma 2.068 m por su cara norte, por el Robledal.
Escogimos este sendero además de por que es uno de los mas bellos, por la esperanza de encontrar algún resquicio de nieve, tras la nevada de los pasados días, cosa que fue posible, pero ya no quedaba casi nada de nieve, y la que había apuraba ya sus últimos instantes en la cima. Es de destacar que para la próxima vez que se quiera “pisar nieve” en la Maroma, el sendero mas apropiado es el del Alcazar, discurriendo el ultimo tramo de este por la verdadera cara norte de la Maroma, el sendero del Robledal al final discurre por la cara sureste de esta.
Personalmente me hacía mucha ilusión subir por el Robledal, por que por ahí fue la primera vez que subí a la Maroma y practiqué el senderismo. Desde entonces estoy enganchao
Dejamos el coche en el área recreativa del cortijo del Robledal, es un sendero muy bien señalizado
Divisando la nieve en el Tajo sol
Entre el Contadero y el Collado Rojo topamos con un rebaño ovejas, con un precioso cordero, fueron nuestras compañeras de camino durante un buen rato
El salto del Caballo
Al salir del collado Lobera y empezar a divisar el tajo Volaero vimos un gran grupo de cabra montes, a los machos solo los pude fotografiar de lejos, pero un grupo de hembras y machos jóvenes se quedaron pastando tan tranquilos y me dejaron fotografiarlos un poco más de cerca
Vistas hacia el mar
Tajo Volaero y el tajo Sol a la derecha
Sierra Nevada
Sierra Nevada y Sierra Almijara
La fuente de la Tacita de plata
Escalofriante
Las nubes anunciaban su inminente llegada
La primera nieve que nos encontramos
El vértice geodésico de la Maroma
Después del merecido bocata un rato de relax
Algunas fotos de la cima con su vértice geodésico
Como avisaron un rato antes, las nubes llegaron
Tejos
Ya de vuelta no nos cansamos de admirar la belleza de este sendero, y con las últimas lluvias tenía todo un color radiante.
Corrales de Martín
Esta fue la subida, un poco precipitada pero la disfrutamos un monto, he de destacar que nunca había visto tanta gente en la Maroma, llegaban de todos los senderos, y sobre todo por el del Robledal nos cruzamos con muchos senderista.