La primavera pasada me pegué un tute importante por la montaña de Montserrat. Al llegar el verano y conociéndome como me conocía el monte, me propuse un reto personal: definir una ruta de ascenso inédita (sin camino preseñalizado) a uno de los picos de la sierra. Una mañana dominical hice realidad este propósito, y el pasado lunes lo realicé por segunda vez acompañado de dos compañeros de aficiones y profesiones (Eloi y Roger).

Por supuesto, soy consciente que no he descubierto ningún territorio que no haya pisado antes otra persona (supongo que toda la montaña habrá sido “conquistada” en este sentido). Pero al menos tengo la satisfacción personal de haber creado una ruta circular algo original, diversa y variada en un corto espacio de terreno y con inicio y final en la cafetería “Cal Meteocoll” … y que asciende más de la mitad de la subida totalmente campo a través sin ningún trazado previo. El siguiente paso será señalizar este “nuevo camino” en la montaña, y pasar con unas tijeras a cortar vegetación sobrera (sin que me vean los guardas).

El pico ascendido es la Miranda de Santa Magdalena, de 1.132 metros de altura. Una de las atalayas de la región de Tebes (Gorros) de la Sierra de Montserrat, estratégicamente situada para gozar de una gran vista desde el macizo, porque hacia el este, el sur y el oeste, no le hace sombra ningún otro pico tan elevado. Digamos que es uno de los mayores picos que se ven de la montaña remontando la A-2 desde Barcelona hacia Collbató (es el pico que queda justo por encima del antiguo restaurante de Sant Joan). Es el pico de 1.100 metros más próximo al casco antiguo de Collbató, y la ruta circula por la cota 1.000 también más cercana a esta localidad.

En homenaje al amigo Jordi y a su iniciativa empresarial, esta vía la bauticé desde el primer día con el nombre de “meteocoll”. En una corta distancia, calculo que menos de 3 km, se vence un desnivel de unos 750 metros, de modo que no es tampoco un paseo rápido ni cómodo, puesto que el tramo “salvaje” contiene algún paso que merece algo de atención sin ser digno de escalada (punto naranja en el mapa adjunto), y ya hacia el final hay dos cortos pasos de escalada de II grado al menos (puntos rojos). De todos modos, está al alcance de cualquier aficionado a la montaña mínimamente iniciado.

En un mapa de la zona he marcado con sendos círculos azules el punto de partida (Cal Meteocoll de Collbató) y la cumbre. La ruta de subida es por el trazo amarillo (tramo de camino marcado) y por el verde (tramo campo a través). La ruta de descenso la he pintado de azul y discurre completamente por sendas y caminos oficiales. En la ortofoto, está señalada en rojo la ruta de ascenso, y se observa además del pueblo de Collbató el monasterio de Montserrat en el extremo nordeste.

Ahora voy con la descripción de la ruta y algunas fotos del recorrido del pasado lunes. Espero no hacerme pesado. Salimos de la plaza de l’Esglèsia de Collbató (de la cafetería meteocoll para ser exactos) (388 m) hacia el camino que lleva a la Salut, pero antes de llegar a esta ermita nos desviamos a la izquierda hasta tomar el trazado del GR que sube por el atajo dels Graus. Del GR nos desviaremos pronto tomando un PR que sube a mano derecha, conocido como el atajo de Fra Garí, y que nos llevará al camino principal de subida al monasterio desde Collbató (675 m). Este PR es el tramo con la pendiente media más pronunciada, a pesar que no contiene ningún paso difícil, aunque el contínuo ascenso pronto se acusará en forma de cansancio si no se hacen algunas paradas estratégicas o no se está en plena forma. 2 fotos de este PR, la primera la vista del pueblo desde el mirador que hay a mitad de subida (cota 530 aprox), y otra de mis compañeros entre los “pasadizos” de roca y vegetación.

1 foto más del tramo final. Hay una especie de capilla en una cavidad donde todavía quedaba un belén que alguien debió subir en diciembre.

Al llegar a la cota 800, topamos con el primer obstáculo importante: una pared vertical de unos 15 metros. Evitaremos tan complejo trance, descendiendo por la izquierda hasta unos matorrales de coscojo. Desde el matorral bordearemos por debajo la arista, hasta que de nuevo aparece una vía de ascenso a la arista asequible.
Una foto más aparente que otra cosa de cuando nos encontramos con este escollo. Eloi empieza a pensar que lo llevo al huerto.

Una foto más del paso que nos sirve para recuperar la arista.

Y otra de Roger desde arriba, viéndose una parte del cordal que remontamos.

y el paso de la Escopetada desde abajo, mientras un servidor lo superaba.

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