Ya os hablé de la
Granizada Express con la que me topé el Logroño en septiembre. Aquel viaje por tierras de La Rioja, Navarra, Vitoria y Burgos dio para algo más.


Aunque la meteorología ya no se mostró tan espectacular como aquel día, sí me llamó la atención lo avanzado que puede mostrarse el otoño por aquellas tierras aún siendo el arranque de septiembre. Cielos grises y ligeros goteos en Vitoria y Pamplona... A los que siguió después un tiempo más soleado en Burgos; pero frío, con mínima de 9ºC, algo que no ocurre por Málaga en muchos días de invierno.
De viaje en coche entre Logroño y Vitoria, al atravesar las estribaciones orientales de la Cordillera Cantábrica, me topé con esta enorme ceja nubosa que tapaba el macizo montañoso. Era espectacular observar como descendía la nube ladera abajo.




Dentro de la nube, espesa niebla y un precioso bosque cerrado cantábrico.

Cielos grises en Álava, Pamplona y La Rioja. Los paisajes bodegueros con un gris cielo de fondo.





En Burgos tiempo apacible, estable. Templado de día y frío de noche. Y eso que no había acabado el verano astronómico.

De vuelta a Madrid, unos bonitos desarrollos en Guadarrama.
