Tuve la suerte de ver estos cielos desde el propio paseo marítimo...salimos pitando de allí porque eran muy muy amenazadores. Tus fotos lo demuestran y además son artísticas pues esa combinación del negro con el dorado de la puesta de sol son impactantes.
Estaba claro que el bloqueo anti-lluvia estaba activado ese día...pero ¡le quedaba poco! evil evil evil