Mal pinta esto.
Fuente:
http://www.radiolaprimerisima.com/CAOS EN BILWI Y DESESPERACIÓN EN WASPAM. LOS VIENTOS SIGUEN AZOTANDO LA ZONAFecha: septiembre 4, 2007
El huracán Félix se convirtió el martes en un monstruo de categoría 5 y azotó la costa Miskito arrancando tejados y obligando a miles de personas a evacuar el área.
Nadie durmió durante toda la noche en la RAAN. "El viento es terrible. Hay un rugido cuando arranca los tejados de las casas", dijo Lumberto Campbell, delegado presidencial para la Costa Caribe, quien se encuentra en Bilwi al frente de la emergencia.
"No hay electricidad porque se cayeron todos los postes que sostienen los cables", señaló. Campbell dijo que los tejados salían disparados contra los árboles, y después se interrumpió la comunicación.
"Puerto Cabezas está en el suelo, está destruido", dijo llorando una vecina de la ciudad que se comunicó con el canal 2 de televisión.
Una niña de tres años murió en uno de los barrios costeros de la ciudad, debido a las inundaciones, reporta una fuente de la Defensa Civil de Bilwi. También reporta al menos seis embarcaciones desaparecidas, con una número indeterminado de pescadores a bordo.
La fuente agregó que al menos 600 viviendas han sido totalmente destruidas.
La torre de Radio Caribe ha sido derribada, los techos de los edificios principales de Bilwi, como la Iglesia Católica y el Consejo Supremo Electoral, han sido destrozados, la lluvia no cesa desde las diez de la noche del lunes.
En Waspam, en la ribera del Río Wanki (Coco), la situación es desesperada, según informa el alcalde Cornelio Teas. No hay combustible, no hay alimentos y no se logró evacuar a más de tres mil personas que viven en las zonas de mayor riesgo.
Todavía a las 7:35, según reportes de vecinos a través de Radio La Primerísima, los poderosos vientos continúan azotando la ciudad de Puerto Cabezas. "Esto está como que comienza, están muy fuertes, no hay nadie en las calles", dijo Oscar, un vecino de Bilwi.
La gente cuenta cuenta de árboles y postes eléctricos caídos, la voladura de techos y letrinas destruidas en la ciudad de Bilwi, principal ciudad portuaria de la RAAN.
El coronel Rogelio Flores informó en Puerto Cabezas, de que en esa ciudad no se ha registrado ninguna víctima humana, a pesar de que en las calles se aprecian postes del tendido eléctrico tumbados y parte de techos de las viviendas arrancadas por los árboles.
Las lluvias en el Caribe Norte, según las fuentes, han sido moderadas, pero no se descarta que la intensidad aumente en las próximas horas.
Flores, director de protección civil en la zona afectada en Nicaragua, dijo que las autoridades han recibido llamadas de auxilio por parte de tres botes en el mar con un total de 49 personas a bordo. Hasta el momento no había reportes de fallecimientos.
Dijo que más de 12.000 personas habían sido desalojadas. Sin embargo, muchos indígenas miskitos se negaron a abandonar las tierras bajas y más bien se dirigieron a refugios en escuelas.
Había cortes en el servicio eléctrico y telefónico en gran parte de la región, dificultando saber lo que ocurría a medida que los vientos comenzaban a golpear esta zona alejada y pantanosa, con muchas partes a las que sólo es posible llegar en canoa. El gobierno envió más de 500 soldados antes de que llegara la tormenta, pero se preparaba a mandar más ayuda una vez que el huracán se haya retirado.
El poderoso huracán golpeaba las costas de Nicaragua y Honduras y, con sus vientos amenaza con devastar la región tal como Mitch que, hace casi 10 años, dejó miles de muertos y desaparecidos.
Félix tocó tierra hacia las 04H45 de la mañana (10H45 GMT) entre Sandy Bay y Bilwi, muy cerca de Punta Gorda, como a 15 kilómetros al norte de esa ciudad capital de la Región Autónoma del Atlántico Norte (RAAN), dijo el meteorólogo Javier Jiménez.
Félix se está moviendo hacia el oeste a cerca de 26 kilómetros por hora. Se espera que continúe en una trayectoria al Oeste con una disminución gradual en su velocidad de traslación durante las próximas 24 horas. En esta trayectoria se espera que el centro llegue Honduras dentro de unas horas, informa el Centro Nacional de Huracanes de Miami.
Según el organismo, está previsto que el huracán se debilite según avanza por tierra, y se espera que se ralentice su avance.
"Félix" podría provocar una subida de la marea de casi cinco metros y medio sobre los niveles habituales, combinado con fuertes olas.
Además, el huracán conllevará lluvias de entre 127 y 254 milímetros en el noreste de Nicaragua y gran parte de Honduras, que según el NHC "producirán probablemente riadas y corrimientos de tierra con peligro para la vida de la población".
El presidente Daniel Ortega precisó que el "alerta roja" rige en Bilwi y en las localidades de Waspam y Cabo Gracias a Dios, en la frontera con Honduras.
"Estamos trabajando desde ayer en la evacuación de civiles ubicados en zonas de riesgo, para evitar la pérdida de vidas humanas", dijo el mandatario al señalar que desde el lunes se encuentran en la zona los jefes de las principales instancias de atención a desastres del gobierno y del Ejército.
El director del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, Alejandro Rodríguez, había anticipado a la medianoche que Félix giró un poco su rumbo hacia el sur y "va a tocar tierra un poco al sur de la frontera entre Honduras y Nicaragua en las cercanías de Cabo Gracias a Dios".
Ante este cambio en la trayectoria, "los daños pueden ser más extensos en el territorio nicaragüense", dijo Rodríguez que acompañó al presidente Daniel Ortega en un llamado a la población a que tomen todas las medidas para que protejan sus vidas.
Las autoridades centroamericanas evacuaron a miles de residentes y turistas de las costas del Caribe, donde los gobiernos se preparaban para lo peor.
Félix está disminuyendo además la velocidad de desplazamiento, lo que anticipa lluvias más severas, y un creciente riesgo de inundaciones y aludes en las zonas montañosas
"Estamos haciendo evacuaciones preventivas sobre todo en Roatán y Guanaja", dos de las tres mayores Islas de la Bahía en el Caribe hondureño, tanto por mar como por aire, informó Marco Burgos, jefe de la Comisión Permanente de Contingencias de Honduras.
En Honduras, tanto la capital como los departamentos del Caribe, Islas de la Bahía, Gracias a Dios, Colón, Atlántida, Yoro, Cortés y Norte de Olancho, están en alerta roja.
Según el presidente hondureño, Manuel Zelaya, este nuevo ciclón no es como el huracán Mitch, aunque puede provocar "gravísimos daños".
La alerta roja declarada en Tegucigalpa implica la evacuación de un número no determinado de personas, aunque según el cuerpo de bomberos son 300.000 los que viven en zonas de riesgo.
Ya se han evacuado más de 1.800 personas que estaban es Islas de la Bahía, la mayor parte turistas o trabajadores eventuales y se han desalojado familias de las zonas de riesgo en el departamento Gracias a Dios, donde impactará en principio el ciclón.
Las autoridades nicaragüenses movilizaron a 570 militares a esta región, donde se anunciaban fuertes lluvias y se decretó alerta amarilla en varios departamentos del norte del país.
Unas 10.000 personas, en su mayoría de etnia miskita, de las 50.000 que viven en esta región, eran evacuadas a lugares más seguros.
Unas 55 comunidades en los municipios de Bilwi, Waspán y todo el curso medio del río Coco hasta su desembocadura en Cabo Gracias a Dios, en el noreste del Atlántico y fronteriza con Honduras, también estaban en alerta amarilla.
En Guatemala, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres decretó alerta naranja ante la llegada de Felix.
En Belice las autoridades iniciaron evacuaciones preventivas de los cayos y algunas zonas costeras del sur del país, informó a la AFP el responsable de operaciones del organismo de Emergencias Nacionales, Santiago Acosta.
En El Salvador, las autoridades de Protección Civil decretaron alerta amarilla por las lluvias, aunque de momento no se prevén evacuaciones preventivas, y en Costa Rica, la Comisión Nacional de Emergencias está preparada para evacuar comunidades vulnerables afectadas por las lluvias, especialmente en el Pacífico y la zona central del país.