Cuba espera temporada ciclónica activa Cuba espera una temporada ciclónica activa ante la conjunción de altas temperaturas en la superficie del mar y la inhibición del fenómeno de El Niño, señalaron hoy fuentes académicas.
Lo importante es prepararse bien, ya sea activa o poco activa, expuso el jefe del Centro Nacional de Pronósticos del Instituto de Meteorología de Cuba, José Rubiera, al referirse a la ya cercana temporada que se prolonga del 1 de junio al 30 de noviembre.
Nadie puede pronosticar con meses de anticipación la ocurrencia de una tormenta tropical, añadió Rubiera durante una reunión en el Centro de Dirección del Consejo de Defensa Provincial de Ciudad de La Habana como parte del ejercicio Meteoro 2010.
Además del debilitamiento de El Niño, el científico expuso que en abril pasado se reportaron las temperaturas del mar más cálidas conocidas para ese mes desde 1860.
Se pronostica que el Océano Atlántico tendrá altas temperaturas y el Pacífico será neutro (por la debilidad de El Niño, u oscilación de los vientos del sur) por lo que habrá condiciones para la ocurrencia de ciclones, subrayó Rubiera.
A esa situación se une que Cuba, dentro del Hemisferio Occidental, se encuentra en el ciclo multidecadal iniciado en 1995 que provoca altas temperaturas en la superficie marítima, que le da energía a esos fenómenos.
En 2009, Cuba no tuvo afectaciones de huracanes, pero en 2008 tres muy intensos Gustav, Ike y Paloma provocaron daños por casi 10 mil millones de dólares, especialmente en la vivienda, redes eléctricas y telefónicas, y en la agricultura.