Buenas tardes,
Los impulsos pesimistas pasan desapercibidos para el devenir meteorológico. La atmósfera discurrirá a su antojo mientras muchos se lamentan porque no llega el tiempo de sus sueños.
Se viene observando en este foro (y en otros) una negatividad acerca de casi todo lo que ocurre desde el punto de vista meteorológico que, sinceramente, agota. Agota mucho. Pareciera que ya nada es suficiente. Como si quisiéramos que se repitiera una y otra vez el tiempo atmosférico de los libros del cole, con los dibujitos de las cuatro estaciones perfectamente definidas. Pero eso, señoras y señores, nunca ha sido la realidad.
Es cierto que el invierno (desde mediados de diciembre, para ser más exactos) está resultando algo anodino, aunque no por ello menos interesante. A los que nos apasiona la meteorología (desde la niñez) nos encantan casi todos los tipos de tiempo, aunque...obviamente gozamos como el que más con las situaciones adversas y complejas. Pero ello no resta valor a los periodos anticiclónicos, con sus hielos, sus cielos azul intenso, sus rocíos, sus amaneceres encendidos, mares en calma o noches estrelladas. Y...ojo: máxime cuando ese tipo de situaciones llegan tras temporales como el del otro día, con regada general, nieve abundante en las montañas y ambiente plenamente invernal.
Ya nadie recuerda el otoño pasado, que dobló o incluso triplicó la lluvia normal para esa estación. O el invierno pasado, repleto de nieves, que acabó por reventar en una primavera histórica que cuadruplicó la cantidad de precipitación en amplias zonas. O el verano, fresco y rebosante de agua tras un deshielo que no llego a terminar. Yo diría, incluso, que en este día a día tan veloz ya nadie recuerda el temporal de la semana pasada. Y eso es triste.
Vivimos en el ámbito mediterráneo, máxima expresión de la irregularidad climática y meteorológica. Por tanto, es de esperar rachas de anticiclón que se rompen abruptamente con arremetidas hiperhúmedas que duran semanas o meses; o rachas medianamente húmedas que se alternan con semanas secas; o grandes sequías que desaparecen "de la noche a la mañana"; o...años de tiempo como el de los dibujos de los libros. Ni más ni menos. Y lo que esa irregularidad afecte a nuestra actividades, dinámicas o estado de ánimo no dejará de ser, siempre, una percepción nuestra...que a la atmósfera le importará más bien poco.
Lamento el comentario, quizá fuera de lugar en el topic (sobre todo teniendo en cuenta que tampoco analizo modelos), pero es que es justo en este topic de modelos (y en el de otros foros) donde se reflejan insistentes esos pesimismos que, con todo el respeto, me parecen absurdos. Una cosa es comentar que sería necesario que lloviera más...y otra es dar por hecho que el tiempo no va a cambiar...sin más. Este invierno, con lo relativamente esquivo que está siendo, está abonando de manera excesiva ese pesimismo que tan de moda está ya en casi todos los ámbitos de la vida.
En fin, a los optimistas, sabedores de que poco se puede hacer contra esta tendencia del "nada es suficiente", solo nos queda...echar más paciencia, supongo.
Y, por supuesto, gracias siempre de verdad a los que analizan modelos de manera objetiva, por su pasión, su tiempo y su buen hacer
Saludos!