La noticia nos puede dar alguna esperanza, porque como la NAO se ponga negativa, podemos tener entradas de calor africano,
y ello podría reducir la vida del bicho.
gracias Jota, por el artículo
Fíjate que yo lo veo más bien al contrario. En febrero, con la NAO/AO muy positivas hemos tenido entradas de la dorsal africana mutando luego al azoriano y con unas isos muy altas por toda la península. Ahora con los índices NAO y AO bajos más bien va a ser más probable la irrupción de fríos, lluvias y continuidad de temperaturas más bajas que la media. Vamos como lo que está ocurriendo y como lo que parece que va a ocurrir a tenor de las (hoy) actualizadas predicciones mensuales. Así que calor, con estas situaciones, es más bien complicado, al menos con cierta continuidad que es lo que podría (porque no está probado 100%) matar al bicho. Dicho esto, tengo que admitir que prefiero este tiempo, porque el coronavirus pasará, al igual que toda esta crisis, pero la sequía que tenemos encima no se irá tan fácilmente. Así que el calor, que no faltará a su cita por nuestros lares, es preferible que se retrase lo más posible puesto que necesitamos situaciones inestables para el campo, acuíferos y pantanos.