Te digo lo mismo que Tartesso; tiene que ser la leche contemplar un espectáculo así, tíu.
Me acuerdo que, en estas Navidades pasadas no, en las anteriores, un día que estaba entrenando con la bici de montaña por tierras de Soria (cerca de Somaén, a 5 kms. de Arcos de Jalón y a unos 15 de Medinaceli), me encontré con una musaraña en medio del asfalto... Coño; paré echando leches, me di la vuelta porque la iba a pillar algún coche aunque por la carretera que yo iba no pasan muchos vehículos, pero el animalillo se dejó coger tranquilamente. Dado el frío que hacía (estaba helando aún), yo llevaba unos guantes de cuero, y por eso lo cogí con confianza (pensé "si me muerde, ya puede apretar porque no me va a traspasar los guantes...") y la dejé fuera del peligro de la carretera.
Se quedó al solecillo unos segundos, mirándome y moviendo su gracioso hociquillo, y se marchó adentrándose en las hierbas...
Sólamente este pequeño acontecimiento me llenó de satisfacción y me lo pasé como si hubiera estado presenciando otro espectáculo mayor... Así que lo tuyo, Dani... debió ser la leche ¿eh? Un saludo.