Ahora que estamos atentos a estos elementos dentro de nuestro hemisferio, podremos, quizás, sacar algunas conclusiones. Me gustaría saber, pero por mi falta de estudio en el tema no puedo estar seguro, si ese Pacífico casiecuatorial más frío de lo normal (La Niña) tiene consecuencias en cuanto a los sistemas de presión en ese área. Quiero decir: si tenemos un océano más frío en el Pacífico ¿las altas presiones en esa zona se harán más fuertes? Es quiero comparar un robusto y amplio anticiclón en el Pacífico, como una enorme roca que se echa en medio de un río de agua... Esa roca provoca turbulencias corriente abajo de la misma. O, como otro ejemplo, las islas canarias afectadas por los vientos alisios = formación de vórtices de Von Karman corriente abajo... Es posible que La Niña puediera actuar como un obstáculo frente a la corriente general del oeste, produciendo anomalías que se extendieran corriente abajo a partir de esa región del Pacífico más frío. Lo malo es que esas turbulencias se notan, tanto más, cuanto más cerca del "obstáculo", por lo que podría ocurrir que Europa occidental se quedase fuera ya de esa región de "sombra", inmediata al "obstáculo". Es decir, sería Norte América quienes recibirían las consecuencias más pronunciadas de este fenómeno pero, quizá Europa occidental no lo llegase a notar.
Por otra parte, saliéndome un poco del tema y yéndome al Atlántico Tropical, se esperaba que esta temporada fuera hiperactiva, similar a la de 2005. No está siendo así, aunque septiembre haya sido muy activo. La razón es que se esperaba una relajación de la cizalladura al formarse una fuerte Niña. Sin embargo, mi impresión es que la cizalladura en el Atlántico tropical ha estado más o menos en la media normal... por lo que La Niña no ha tenido demasiada incidencia en este aspecto, al menos este año...
Creo que establecer una relación directa CAUSA - EFECTO, en este caso, va a ser imposible.