La verdad es que en un congreso de la AEC -Asociación española de climatología, al que asistí en el 2010 , ya se hablaba de ello,
cuando aún no habían muchas señorías apoltronadas en los sofás del calentamiento global.
Ahora que se han hecho más estudios al respecto , parece que la cosa va siendo más certera.
Y yo me pregunto , no estaremos comenzando a notar uno de los ciclos de Milankovitch ?
el ciclo del cambio de inclinación del eje de rotación de la Tierra.....
Existen variaciones en la propia actividad solar que pueden provocar diferencias de 1 - 2ºC en la temperatura , ya que la radiación solar que recibimos es casi constante , pero la Tierra no la recibe siempre de la misma manera.
El eje de rotación de la tierra no es perpendicular a la eclíptica de la orbita, se separa 23´5 º de media por la presencia de la Luna.
Gracias a esa inclinación y al hecho de que la orbita es elíptica se producen cambios en el ángulo y la distribución de la energía que nos llega a lo largo del año, lo que determina la existencia de las estaciones.
Pero las influencias gravitacionales de otros planetas hacen que la inclinación del eje de rotación varíe entre 21´5º y 24´5º en una periodicidad de unos 41.000 años, y esa ligera diferencia afecta al contraste entre el verano y el invierno en las latitudes altas de ambos hemisferios.
Cuanto mayor sea la inclinación , mayor será la diferencia de insolación estacional.
Actualmente es de 23´4º , disminuyendo , con lo cual a menos inclinación la radiación solar es más regular o intensa .
Además , para liar mas la cosa, tenemos la precesión de los equinoccios, que sucede entre unos 23.000 ó 25.600 años .
Este movimiento forma parte también del eje de rotación de la Tierra, que se mueve rotatoriamente, simulando un bamboleo de una peonza, debido a que la Tierra es un elipsoide achatado en los polos .
Siendo este movimiento la causa de la precesión de los equinoccios , el cual determina la posición de las estaciones en un hemisferio en la órbita terrestre.
La actual configuración parece que está permitiendo que las diferencias entre invierno-verano sean menores en el hemisferio Norte y que se extremen en el sur .