Si no leo mal la nota de MeteoFrance, la cantidad registrada el pasado 9 de julio en Paris fue la máxima cantidad absoluta en la capital parisina. Allí la torrencialidad no es tan alta como el Mediterráneo, es evidente, pero no me imaginaba que el registro máximo fuera tan bajo:
http://www.meteofrance.fr/actualites/51611095-record-absolu-de-pluie-a-parishttps://internacional.elpais.com/internacional/2017/07/10/mundo_global/1499698416_739432.html
Si hay algo a lo que un parisino está acostumbrado es a la lluvia, ese elemento que acompaña las vidas de los residentes de la ciudad luz una buena parte del año y hace que el paraguas se convierta en un complemento omnipresente. Pero por eso mismo, cuando un parisino se sorprende por una tromba de agua, es que esta ha sido realmente excepcional. Y la que cayó de la noche del domingo al lunes en París merece ese calificativo.
Para Météo France, el servicio meteorológico francés, es un “récord absoluto de lluvia” en la capital francesa. La estación meteorológica de Paris-Montsouris registró 49,2 mm de lluvia en una hora (entre las nueve y las diez de la noche), una cantidad jamás vista desde que se hacen este tipo de mediciones. En total, fueron 66 mm de lluvia entre las ocho de la tarde del domingo y las ocho de la mañana del lunes. Dicho de forma más gráfica: llovió en unas horas lo que normalmente llueve en todo el mes de julio. El récord anterior estaba en 47,4 mm, alcanzados el 2 de julio de 1995.

No hacían falta sin embargo las mediciones de los expertos para saber que lo que caía en París no era normal. Entrada la noche, varias estaciones de metro se convirtieron en cascadas y piscinas improvisadas en las que los pasajeros que se vieron sorprendidos por la tromba se vieron obligados casi a chapotear para salir de la estación. ¿Los paraguas? Abiertos dentro de las estaciones para evitar las goteras. Hasta una veintena de paradas de metro se vieron afectadas, aunque la empresa de transportes municipal aseguró este lunes que el servicio había sido restablecido en todas las líneas. Algunas estaciones, eso sí, seguían parcialmente cerradas.
Pese a su impacto en la capital francesa, la tromba que cayó en París no fue sin embargo la peor. En Civray, en la región de Vienne, en el suroeste del país, cayeron 86 mm de lluvia y en Lons-le-Saunier (este), 77 mm. Ahí, ni un paraguas salvaba la situación.