Una tormenta en Teruel provoca la alarma en Ademuz y Los Serranos por el riesgo de desbordarse el Turia
La Confederación confía en que los embalses absorban la crecida
Una fortísima tormenta, que descargó a última hora de la tarde de ayer sobre el sur de la provincia de Teruel, sembró la alarma en las comarcas valencianas del Rincón de Ademuz y Los Serranos, ante el peligro de desbordamiento de los ríos Ebrón y Turia. El Centro de Emergencias de la Generalitat decretó la alerta hidrológica.
El Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat decretó anoche la alerta hidrológica en el cauce del río Turia, en su tramo medio, hasta el embalse de Loriguilla, por el riesgo de desbordamiento ante la crecida del cauce, por las fuertes lluvias caídas en el sur de la provincia de Teruel.
El riesgo de desbordamiento, que afectó a las comarcas del Rincón de Ademuz y los Serranos, obligó a cortar la carretera N-330, en el punto kilométrico 274,4, a su paso por Torrebaja, en la comarca del Rincón de Ademuz, durante al menos media hora, y a primeras horas de la noche se recomendaba circular por ella con mucha precaución.
En dicha localidad confluyen el río Turia y su afluente, el Ebrón.
Según fuentes de Emergencias, agentes de la Guardia Civil y de la unidad forestal se mantuvieron vigilando el cauce del río, para ver su evolución y poder dar aviso en caso de apreciar un incremento de su caudal.
La alerta se decretó después de que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) informara a Emergencias de que las fuertes lluvias habían hecho que el caudal del Turia pasara de 0,6 metros de su altura normal hasta los 2 metros a su paso por el término de Torrebaja.
Al parecer, las fuertes lluvias sobre Teruel y algún punto del norte de la provincia de Valencia han superado en algunas localizaciones los 150 litros por metro cuadrado y en poco más de una hora, lo que provocó una súbita crecida de los ríos y que los cauces secos de los barrancos se convirtieran de repente en torrenteras.
Tras recibir esta información, el centro de Emergencias advirtió telefónicamente y a través del protocolo establecido a todos los municipios que pueden verse afectados por la riada. El aviso se trasladó de inmediato a las aldeas y otros núcleos de población más próximos al río, así como a las zonas de acampada y a los agricultores con fincas cerca del cauce.
Al mismo tiempo, desde Emergencias se insistió en la recomendación habitual en estos casos de que se extreme la precaución en cruces de carreteras o vados que pueden verse afectados por la subida del río.
Las autoridades hidrológicas confiaban en que el aumento de caudal del Turia sea absorbido por los embalses de Benagéber y Loriguilla, de manera que no se prevé que aguas abajo de este último lleguen a registrarse problemas.
Parece ser que parte de las lluvias caídas ayer sobre los Montes Universales, en Teruel, también pueden beneficiar las reservas de los embalses del Júcar, sin revestir en este caso ningún peligro.