NOTA: Es un estudio para Málaga.
La intención era buena y el trabajo viniendo de quien viene está bien hecho sin duda, pero la transmisión de la información al periodista es (a mi entender) penosa, por no decir lamentable.
Ojo, a quien lea esto que entienda lo que quiera, si quiere creerse que esto explica que no va a llover, que se lo crea, allá el.
Esto y nada es lo mismo si lo que queremos es predecir si va o no a llover en Semana Santa. De hecho lo que han hecho
no es una predicción como por contra dice el titular de la noticia, y en el desarrollo del texto,
se trata de una revisión estadística de hechos pasados.
Eso de hacer una estadística del pasado para explicar el futuro no lo termino de ver. Separemos lo ocurrido (pasado) de lo que viene (futuro)
Me mata como empieza el artículo "sin querer lanzar las campanas al vuelo, los cofrades y el sector turístico tienen muchas posibilidades de vivir una Semana Santa con plenitud"... pues ha lanzado las campanas al vuelo y éstas van ya por "to lo arto er" monte.
Escasa probabilidad de lluvias durante la Semana SantaUn estudio estadístico elaborado por meteorólogos de Aemet prevé buen tiempo en casi todas las procesionesSin querer lanzar las campanas al vuelo, los cofrades y el sector turístico tienen muchas posibilidades de vivir una Semana Santa con plenitud. Después del chasco de la pasada, cuando las lluvias generalizadas en la capital y en la provincia encharcaron las ilusiones de miles de malagueños y visitantes, la que arrancará el próximo 1 de abril se prevé mucho más soleada. Al menos así lo refleja el estudio que han elaborado los expertos Fausto Polvorinos y Pablo Aguayo, del Centro Meteorológico de Aemet en Málaga, y que se basa en la revisión estadística de lo ocurrido entre los días 1 y 8 de abril de los últimos 69 años (desde que hay datos). De estos ocho días, no suele llover en 6,6, por lo que, siempre según lo ocurrido en años anteriores, solo hay probabilidad de aguaceros durante una jornada y media.
En concreto, la probabilidad de precipitación al menos un día –descontadas las cantidades inapreciables– es de un 55%; mientras que no llueve ninguno en el 45% de los casos y al menos dos, en el 36%. Esto es, lo más probable es que una jornada esté pasada por agua, y los investigadores han determinado que el que tiene más papeletas es el 8 de abril, que este año coincide con el Domingo de Resurrección. En el otro extremo, las cofradías del Domingo de Ramos son las que tienen más opciones de salir en procesión con normalidad. El resto de jornadas se mueven en un rango bajo, entre un 19 y un 23% de posibilidad de aguaceros.
Pero también hay muchas opciones de que pase totalmente en seco; o de que sean dos las jornadas de incertidumbre. Para el resto de los supuestos el porcentaje se reduce notablemente: un 20% de que lo haga tres días; un 13% de que llueva en cuatro; y testimonial en el resto de supuestos.
Visto de otra forma: en 427 de los 552 días estudiados no ha habido ninguna precipitación, lo que supone el 77%; mientras que en 96 jornadas esta ha sido apreciable. En 24 años de los 69 analizados no hubo ningún aguacero, mientras que en siete más estos fueron solo anecdóticos, lo que da un 45% de opciones de que no llueva ningún día de forma apreciable.
Cambio climático
Pero hasta para prever como será la Semana Santa hay que tener en cuenta el cambio climático, de ahí que Polvorinos y Aguayo hayan analizado de manera aislada lo ocurrido en las dos últimas décadas. En función de este intervalo las conclusiones también son positivas, puesto que en 11 años no ha habido lluvias de importancia, con una climatología más favorable que la del periodo 17 a 24 de abril (esto es, cuando se celebró la del año 2011). Sin embargo, también hay peros, y estos provienen de la predicción mensual lanzada ayer por la Agencia Estatal de Meteorología, según la cuál abril podría ser un poco más lluvioso de lo normal a nivel nacional. Para Fausto Polvorinos este hecho no alterará sustancialmente las previsiones, aunque puso de relieve que el escenario atmosférico propio de la primavera obligará a concretar los pronósticos «día a día».
Con todo, hasta entonces todavía quedan dos semanas y media, y a corto plazo Aemet prevé cambios meteorológicos: a partir del próximo viernes se prevé que llegue una baja aislada, que podría dejar chubascos tormentosos, sobre todo en el interior y la zona oeste de la provincia.