Primero de todo, si veis que este reportaje debe estar en otro sitio, no dudéis en moverlo. Dicho esto, vamos con el reportaje.

Ayer he hecho mi primera minipateada por el monte. En un terreno un tanto irregular, con muchísimas piedras enormes por el camino, que había que pasar por encima de ellas (menos mal que eran redondeadas), y con unas cuestas arriba bastante pronunciadas en ciertos tramos.

Claro que hasta llegar al monte, hay que ir en coche. Esta fue la ruta.



Y esto, lo que hemos recorrido andando. Como veis, hay que ir por el medio de las piedras. Sólo han sido unos 270 metros, pero con bastante desnivel, en tramos, y bastante complicado para mí.



Vamos cogiendo altura...



Ahora, una vez en la cima (a donde puedo llegar yo andando), que no he puesto su altura (410 msnm, según mi reloj-altímetro), tenemos estas vistas, bastante buenas, ya que, si no me equivoco, es el 2º monte más alto de la zona (la cima cima, tendrá unos 450).

A tan sólo unos metros de mí, hacia el W, este pedrusco.



Esta especie de hiedra, que trepa por la roca, estaba detrás de mí cuando yo estaba sentado, descansando. Es decir, estaba hacia el S.



Esos montes que se ven al fondo, corresponden a la sierra del Xistral, a donde pertenece por ejemplo el Cadramón, un monte de un poco más de 1.000 msnm, a donde suelo ir yo a la nieve en invierno.





Yo descansando, después de la caminata.



Más...

El cielo esta tarde, por allí, estaba de esta guisa. A pesar de ello, no ha llovido ni una sóla gota.



A contraluz:



Mis padres se atrevieron a subir a la roca que os puse en una foto anterior...para mí, imposible. Esto está allí.



Nos vamos yendo, que va siendo hora...

Yo apoyando en semejante rocón. Tiene un "asiento", pero un tanto inalcanzable desde abajo. Sí desde arriba, colgado en un arnés, se puede descender hasta él.



Penúltima foto...



Y última foto...



Esto es lo que ha dado de sí la última media tarde de hoy.

Espero que os guste el reportaje, chicos. Con ese propósito lo he hecho.

Muy bonito el paisaje y el reportaje, ¡cómo me gustó Galicia en mi único viaje a ese bonito lugar!
Pues nada, una vez que has empezado pues a seguir con las pateadas por el monte, ya verás qué bien sienta.
Un saludo.