Buenos días:
En el Heraldo de Soria de hoy viene el dato de precipitación del año 2011 en el observatorio de Soria capital: ¡solo 302 milímetros! cifrá patética, cercana al desierto. Los cuatrocientos y pico de Abioncillo saben a gloria comparados con esta cifra. No digamos tus datos lapóveda. Habrá que pensando en ir sacando algún santo de cualquiera de los muchos que tenemos milagrosos por aquí aunque como dijo un cura cuando los vecinos le dijeron que sacara al santo para esto: " si queréis lo saco, !pero de llover no está...!"
http://www.heraldodesoria.es/index.php/mod.noticias/mem.detalle/idnoticia.94856/relcategoria.301Las precipitaciones bajan un 43,6% en 2011 perjudicando las siembras tardías y los ciclos
Si no llueve o nieva en los próximos tres meses los agricultores podrían enfrentarse a un problema en las cosechas
Heraldo
Si, meteorológicamente hablando, hubiera que definir el ejercicio 2011, sin duda, la ausencia de precipitaciones se encontraría en la primera posición. No en vano, 2011 marcó cifras bastante inferiores a los valores considerados normales por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) recogiendo 306,7 litros por metro cuadrado durante los doce meses del año mientras que los valores meteorológicos normales elevan las precipitaciones anuales medias en torno a los 502 litros por metro cuadrado, un dato muy alejado del que dejó el año pasado en los pluviómetros. De hecho, durante 2010 se recogieron precipitaciones que ascendieron hasta los 639,8 litros por metro cuadrado lo que representa un descenso del 43,62% en 2011.
Esta situación está afectando, sobre todo, a los agricultores que, al no haber llovido prácticamente desde junio «están retardando las labores propias de esta época en las que se siembra la cebada tardía», indicaron ayer a HERALDO fuentes de Asaja Soria. Si la situación continúa como hasta ahora, con una tierra carente de humedad y excesivamente seca, «perjudicará las siembras tardías, que deberían empezarse ahora». Pero, teorizando, las malas noticias no terminarían ahí y podrían ir más allá puesto que «la planta de lo que ya está sembrado podría perderse» pudiendo producirse una catástrofe a nivel de la cosecha.
Por otra parte, el secretario general del sindicato agrario a nivel regional, Antonio Turrado, destacó el pasado miércoles, durante el balance anual que realizó, que comienza a ser «necesario» que se produzcan precipitaciones en forma de agua o nieve para que los embalses «no nos tengan con el corazón en un puño», manifestó