Mientras tanto se confirma, salí a dar una vuelta por la zona para ver los desperfectos originados por las lluvias y de paso acercarme al cauce del Barranco Real de Telde a su paso por la ermita de San José de Las Longueras. Está claro por lo que pude observar, que la tierra está al 100% del máximo de su capacidad de absorción. Gran cantidad de barro, cicatrices en el terreno de las fuertes escorrentías y desprendimientos en los margenes del barranco que sinceramente me impidieron bajar al fondo a fotografiarlo.
Mirando hacia el interior de la isla, zona de Valsequillo, La Breña y Cazadores, se observa como se ha generado un pasillo de nubes incansables que no dejan de arrojar agua. En los pocos claros que se entreven se puede observar un magnifico Congestus anclado a la cumbre, aunque me desorienta, ya que he visto fotos de la cuenca de Tejeda, donde luce el Sol, así que no se si está dejando precipitaciones por las zonas altas. En estos instantes a rolado el viento y comienza a soplar con intensidad media, direción SE, así que seguiremos observando el desarrollo de las próximas 24 horas, que pueden ser divertidas para los aficionados a esto de la meteorología, pero complicadas para el ciudadano de a pie y las infraestructuras locales.
Fotos de la tierra totalmente empapada y pasillo de precipitación.