En mi caso a veces me voy por las ramas y vierto mucho veneno y críticas hacia cosas que no me gustan, se me conoce por mi fuerte carácter.
Que decir del día de hoy, viento moderado, humedad estable, máximas de 26 y mínimas de 20 grados, viento de noreste pero más oblicuo de lo habitual, ninguna nube, visibilidad buena en general, mañana seguramente sea igual.
La realidad es que el seguimiento meteorológico donde vivo es absolutamente monótono, es como el día de la marmota pero con bajo presupuesto.
Cada día se parece al anterior, con más o menos viento/calima, quizá algún día se nubla algo pero sin pasar a mayores, por eso me acabo por inercia fijando en eventos meteorológicos lejanos o en divagaciones varias producto de tener tiempo libre inesperado.
No llueve, no hay niebla, no graniza, no hay tormentas, el viento nunca pasa de cierto umbral, no hay olas de frío, no hay heladas. Desde Hermine lo más sorprendente que he visto han sido ver el pasado marzo las toallitas húmedas saliendo de las alcantarillas y una parada de bus que el viento tumbó un día de mucho viento, también un diablo de polvo por Juan Grande, cruzó la autovía y fue emocionante todo hay que decirlo.