« en: Junio 28, 2009, 22:03:48 pm »
Bueno pues este texto que os presento es del periódico "La Nueva España" de aqui de Asturias:
Santullano, Las Regueras (ZONA CERO DE LA TORMENTA)
Un ciclón de diez minutos arranca árboles, farolas y tejas e inunda bajos en la capital de Las Regueras, y deja sentir su fuerza en el centro de Asturias.
El cielo se oscurece de repente y comienza una tensa calma. Se avecina una tormenta. Primero unos gotarrones, truenos, unas rachas de viento y lluvia más fuerte. En Santullano, la capital de Las Regueras, esto fue sólo el principio. Cuando los vecinos se quisieron dar cuenta, ya había pasado el «fenómeno meteorológico extremo». Los expertos no se atreven a bautizar con nombre científico lo que sucedió ayer en Santullano a las tres de la tarde. Rachas de viento muy superiores a los cien kilómetros por hora y lluvia, mucha lluvia, casi granizo. Sólo duró diez minutos, pero bastaron para que cayesen árboles, saltasen tejas, estallasen los cristales de las farolas, se cayesen las líneas de teléfono, se inundasen bajos y cundiese el pánico entre los vecinos. La tormenta parecía el fin del mundo.
El Centro Meteorológico de Santander no tuvo tiempo de avisar al centro de emergencias 112 Asturias. «Tenéis ahí una nube», escucharon en La Morgal cuando la tormenta ya estaba encima. No obstante, Asturias estaba en «nivel de riesgo importante» por tormentas. La peor parte se lo llevó Las Regueras, aunque los Bomberos de Asturias tuvieron que intervenir en la inundación de un garaje en Posada de Llanera. «Si llega a durar más no sé qué hubiese pasado. Estamos que no nos lo creemos», explicó ayer el alcalde de Las Regueras, Miguel Tamargo.
Un matrimonio almorzaba en el jardín cuando le cayó un roble a escasos metros.
La cuadrilla del Ayuntamiento de Las Regueras no daba ayer abasto para subsanar los desperfectos causados por la brutal tormenta. Los vecinos tampoco. A Ismael Llano le sorprendió la tormenta en Otura, a un kilómetro de Santullano. «Sólo fueron unos minutos, pero con una intensidad asombrosa», relató mientras retiraba un fresno que cortaba la carretera del pueblo. En Santullano, José Antonio Quintano comía con su mujer en el jardín cuando vieron cómo un roble caía delante de sus narices. En la misma finca donde cayó el árbol, otro vecino trataba de envolver la hierba en una tarde en la que nadie esperaba una tormenta tan intensa. «Nos sorprendió la fuerza del agua y el viento», explicó Quintano, quien lamenta además «los destrozos en la cosecha». En la finca de Santiago Rodríguez el viento derribó dos manzanos y una higuera. Rodríguez relató que el agua bajaba por la carretera «como si fuera un río». En Otura, Mari Carmen Pérez barre los trozos de tejas que cayeron del tejado: «Entró agua en casa, a pesar de tener las ventanas y puertas bien cerradas. Nunca vi nada igual».
Yo la verdad, no estaba en Las Regueras jeejej, pero estaba en Oviedo y puff una oscuridad... y sobre todo una lluvia y un viento... parecia que nunca había llovido.
Fotos (COPYRIGHT LNE)
« Última modificación: Junio 30, 2009, 22:08:21 pm por Margos »
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