Buenas. La solución para los problemas de Santa Cruz de Tenerife no es poner un radar, es un gasto de dinero que no sirve para nada. El problema es la ubicación que esta en una pendiente de una montaña con sus barrancos y encima pegado al relieve de Anaga. Se han puesto a construir y no han respetado el paso natural del agua, con eso y que no tiene las canalizaciones para desahogar el agua pasa esto. Para colmo han tenido 12 años para solucionar el problema y no fueron capaces. Mas dinero en infraestructuras y menos gastar dinero en tonterias.
No seré yo quien defienda la actuación de nuestros políticos en esta materia y es cierto que se han cerrado barrancos y construido en zonas comprometidas, pero creo que hay que tener en cuenta que desde La Laguna hasta el muelle de Santa Cruz hay 600 metros de desnivel completamente urbanizado. Eso supone una impresionante cantidad de metros cuadrados asfaltados, acerados, etc.. que van a parar al mismo sitio. Dudo mucho que ante lluvias torrenciales sobre esta orografia urbanizada se pueda presentar una solución total y definitiva, porque no creo que se pueda canalizar cantidades de agua como las que se han presentado en los últimos años.
Podremos discutir que se puede paliar de alguna manera, por ejemplo dando alguna solución para que la Avenida de Venezuela no se convierta en un lago siempre o que teniendo el barranco de Santos acompañando en paralelo la bajada desde La Laguna a Santa Cruz, se pueda construir cada cierta distancia unos desvíos que conduzcan el agua a su cauce, pero creo que como dije antes no existe una solución que garantice nada y este tipo de riadas han sucedido siempre y seguirán pasando.
Y esto hablando de la capital, porque si miramos el resto de la isla de Tenerife y también el resto de las islas más montañosas, en pocos sitios podríamos construir con los importantes desniveles existentes. Creo recordar que la Palma es la isla más alta del mundo en relación a su superficie.
Y si alguno tiene dudas que consulte lo ocurrido en el valle de la Orotava en el año 1.826.
Hay riesgos que vienen de la mano con la zona donde vivimos, como éste o el volcánico, por ejemplo.