Las DANAS, por definición, son un amplio concepto meteorológico, donde caben algúnas variantes.
Pero conviene recordar que las antiguas GOTAS FRIAS, -caso particular de las DANAS- tienen una fenomenología característica que nos recordaba Mariano Medina en su Meteorología Básica Sinóptica.Editorial Paraninfo 1976.
(...) Las gotas frias se manifiestan activas mientras conservan una asimetría en los vientos que la rodean; originan entonces fuertes movimientos verticales del aire, con nubes de gran desarrollo vertical.
Se trasladan obedeciendo al mas intenso de los vientos entre los que la rodean; suelen, al principio conservar un trozo de chorro en su periferia, que va emigrando, como circunvalando la gota; esta siempre se traslada obedeciendo a ese viento mas intenso, por lo que su movimiento de traslación es aparentemente caprichoso al no seguir una trayectoria constante. En su borde de ataque es donde tienen lugar la nubes mas espesas y los fenómenos tormentosos. Cuando la distribución de los vientos se hace simétrica, perfecta o imperfectamente, cesa la traslación de la gota, que se convierte en un vórtice ciclónico casi estacionario que absorbe en espiral aire cálido de los alrededores y lo mezca con su propio aire, homogeneizándose el conjunto y entrando en trance de desaparición. (....)
Esta puede ser la historia de nuestra DANA, aunque sorprende el estatismo y la poca movilidad con que la contemplan los modelos durante tantos y tantos días, añade mas alicientes al análisis.
Dinamicamente recordemos que una DANA (también una gota fria, como caso derivado) es un area con un gradiente de densidad creciente hacia su interior (o sea, un mínimo de espesor). Si la gota resulta estacionaria, el gradiente es constante en su perímetro, pero si se mueve, el gradiente de densidades se hace mas fuerte en el borde de ataque, donde luchan el aire frio de dentro y el cálido de los alrededores. Allí aparece otra vez el viento térmico mas fuerte, como si se manifestara un trozo de frente frío en esta zona. Y algúnos mapas sinópticos lo llegan a marcar y seguro que lo marcarán-con cualquier caracter- en las próximas jornadas.
Parece que la predicción ya nos ha dicho y los modelos lo confirman qué es lo que pasará estos próximos dos días; donde estará el borde de ataque, el máximo gradiente, y los fenómenos mas violentos del embolsamiento frio en altura. ¿Pero en días posteriores, cual será el inexcrutable camino, dentro de su lento declinar, de nuestra DANA ibérica?