Hace unos días hemos despedido un mes de enero que, aunque en media acabe siendo térmicamente normal en muchos sectores, en realidad ha tenido dos mitades bien diferenciadas. En la primera mitad, las anomalías positivas de temperatura fueron muy acentuadas y se extendieron a buena parte de la Península. Sin embargo, hacia la segunda quincena, las anomalías frías predominaron, acentuándose bastante hacia la última decena del mes. Lo malo es que la dinámica del mes ha sido, por lo general, seca, más allá de las precipitaciones típicas de las situaciones de norte/noroeste. La entrada fría que tuvimos a finales de mes fue seca, salvo en puntos del Mediterráneo, donde el flujo de levante en superficie daba lugar a lluvias acompañadas de tormenta incluso. Con el mes de febrero iniciado, estamos viendo en los modelos claros indicios de que la calma anticiclónica iniciada hace unos días va a llegar a su fin. ¿Hará febrero honor a su fama de "febrerillo el loco? Vamos a verlo:
La imagen superior muestra el análisis de partida del modelo del centro europeo (IFS del ECMWF) de hoy a las 0 UTC. Los contornos representan la temperatura en 850 hPa, a unos 1500 metros de altitud, mientras que las isolíneas corresponden a la altura geopotencial en 500 hPa, a unos 5500 metros de altitud. A simple vista puede apreciarse que la península ibérica queda abarcada por una dorsal en altura, que está propiciando estos días de estabilidad y cielos despejados. Esta dorsal está acompañada de valores de temperatura en 850 hPa entre 8 y 10 ºC, que son valores relativamente suaves y que están favoreciendo temperaturas agradables en las horas de sol. Sin embargo, hacia Europa central se aprecia una importante masa de aire frío en niveles bajos, asociada a una vaguada del chorro polar. También puede distinguirse una depresión en niveles altos afectando a las Islas Canarias, dando lugar a precipitaciones localmente intensas. Finalmente, es interesante observar que entre las Islas Británicas y la península escandinava, las isohipsas (líneas de igual altura geopotencial) están curvadas ciclónicamente, forman una especie de "v". Vamos a ver qué pronostica el modelo 24 horas después:
La vaguada de Europa central se ha profundizado algo más, y esa región de curvatura ciclónica de las isohipsas comentada anteriormente se ha "descolgado" hasta el Golfo de León. Hacia el noreste de la península ibérica, ya empieza a instaurarse un flujo de norte en los niveles altos, a la vez que desciende la temperatura en 850 hPa. La dorsal sigue abarcando el oeste-noroeste peninsular, así como el Reino Unido, con un anticiclón en superficie de hasta 1045 hPa.
El lunes a las 12 UTC, la entrada de aire frío en la península es evidente, con lo cual bajarían de nuevo las temperaturas. Muy importante es el hecho de que la dorsal anticiclónica ahora aparece algo "tumbada", con su eje orientado hacia el noreste. Eso abrirá la vía a que el aire frío europeo pueda avanzar hacia la península ibérica. De hecho, si avanzamos hasta el martes a las 12 UTC:
La dorsal anticiclónica del Reino Unido aparece aun más "tumbada". El aire frío sigue incidiendo en la península ibérica, con una pequeña baja en altura sobre los Pirineos. Incluso, parece que la vaguada europea interacciona con la depresión de las Islas Canarias. A todo esto, se impondría un flujo de levante en superficie, esta vez con bastante recorrido marítimo, que favorecería un entorno más proclive a precipitaciones en el Mediterráneo. El problema es que se trata de una situación retrógrada, donde los máximos de viento son muy difíciles de predecir. Y ello determinará en qué medida nos va a afectar todo ese aire frío, es decir, la disposición de la vaguada, si nos afectará alguna pequeña baja embebida en ese vaguada. Esos detalles condicionan la distribución de las precipitaciones. Por eso vemos a los modelos cambiando tanto entre salida y salida. Con una situación de este estilo, lo más probable es que las precipitaciones afecten al entorno del Mediterráneo. Si el aire frío se queda algo más al norte, las precipitaciones pueden afectar más a Cataluña, mientras que si se queda algo más al sur, podrían afectar más al litoral murciano y mediterráneo andaluz.
En los agrupamientos (o clusters) del centro europeo podemos ver bien en el panel de la izquierda (previsión para el miércoles a las 0 UTC), que no está nada clara la posición que tomará un mínimo de geopotencial en altura, existiendo 3 escenarios con probabilidades no muy diferentes. El escenario más probable en el pronóstico de esta mañana es que ese mínimo se halle en torno al centro peninsular.
El meteograma para Valencia, por ejemplo, muestra que el descenso de las temperaturas está asegurado y sería acusado: las máximas se quedarían por debajo de los 12 ºC, con mínimas oscilando entre unos 5 y 8 ºC según el modelo del centro europeo. La probabilidad de lluvia aumenta mañana mismo, con la mayoría de los pronósticos entre 5 y 10 mm. Las lluvias aparecerían también el martes y, probablemente, con más intensidad, el miércoles, donde la mediana es superior a 15 mm. Como podemos ver, la caja de la precipitación acumulada el martes está bastante estirada: esto indica que hay mucha incertidumbre. Por ejemplo, se deduce un 10% de probabilidad de que se superen los 35 mm (esto a falta de ver los modelos de mesoescala)
Si nos fijamos en Barcelona, vemos también un descenso acusado de las temperaturas máximas y mínimas, aunque hay mucha incertidumbre con las temperaturas mínimas a partir de mediados de semana, quizá debido a que algunos escenarios pronostican una bolsa de aire frío al oeste que haría que la dorsal emerja sobre el este peninsular, haciendo subir las temperaturas. La mayor probabilidad de lluvia se halla el martes, con la mediana algo por debajo de 10 mm, pero mucha dispersión igualmente, sin descartarse las lluvias los demás días de la semana.
En Málaga también se espera un descenso térmico, aunque sin temperaturas tan bajas y la cosa en cuanto a precipitaciones está bastante en el aire. Sí que podrían darse acumulados relevantes en la zona del estrecho, pero que sean más o menos relevantes y/o generalizadas dependerá de si consigue formarse una baja en el golfo de Cádiz o el oeste peninsular, escenario que algunos modelos han estado sugiriendo estos días con mayor o menor probabilidad. Por ello vemos que el miércoles-jueves hay escenarios que pronostican precipitaciones ciertamente cuantiosas, aunque no es muy probable a día de hoy en el entorno de la capital.
Como vemos, bastante incertidumbre, y eso que estamos a punto de que de comienzo el episodio. En las próximas horas deberían ir resolviéndose algunas de las incógnitas, sobre todo qué posición acabará tomando la vaguada mediterránea y los mínimos de geopotencial en altura. Con eso, podremos saber mejor las regiones más proclives a precipitaciones, aunque ya sabemos que estas situaciones siempre acaban dejando sorpresas, tanto buenas como malas.