Retomo este tema con unas imágenes de 1907. Están tomadas del Archivo Temboury de la ciudad malagueña.
Durante la madrugada del 24 de septiembre el Río Guadalmedina que atraviesa la capital malagueña se desbordó, sin que hubiese caído una sola gota sobre la ciudad.
Según cuentan las crónicas oficiales de Málaga, la lluvia torrencial que cayó sobre la erosianada cuenca del Guadalmedina en la jornada anterior, se tornó en un caudal descontrolado, que causó 40 víctimas (sin contar los desparecidos, que se estimaron en bastantes más) entre Casabermeja (pueblo al Norte de la capital que también está en la cuenca del río) y Málaga.
Pese a que vecinos de pueblos del interior trataron de avisar a la ciudad del peligro inminente que se avecinaba, se llegó incluso a 'despertar' la ciudad con el campaneo de todos los templos, la tragedia no se pudo evitar en su totalidad, y se produjo la catástrofe.
A consecuencia de estas inundaciones se empezaron a plantear defensas a la ciudad... aunque hasta la nueva tragedia de 1.927 no se tomarían medidas adecuadas, como la construcción del pantano del Agujero y la reforestación del margen izquierdo del Río, lo que hoy es el Parque Natural de Los Montes de Málaga.
Os dejo con un mapa sinóptico de Wetterzentrale del 23 de septiembre de 1.907 y las mencionadas fotografías.
Río Guadalmedina en Málaga:
Los efectos en el Pasillo de Santa Isabel:
En Calle Mármoles:
En el barrio de la Trinidad:
Y por la Plaza de la Aurora:
Como se puede ver, en las imágenes de Calle Mármoles o el Barrio de la Trinidad se observa la marca del agua en las viviendas; y que para quien no lo conozca, Calle Mármoles está a unos 300 m del Río y más o menos puede marcar la la parte media del Barrio de la Trinidad.
He pedido, a través de otra persona, imágenes de las inundaciones de 1.927. Quizás me pasen un escaneado de las originales que se encuentran en un archivo de un fotógrafo oficial de la ciudad. Pero es complicado. A ver si sale la gestión.
Y una nota del Archivo Documental de la Ciudad:
Alfonso XIII visita Málaga tras las inundaciones de 1907. Llega, tres semanas después del suceso, el día 17 de octubre acompañado de Antonio Maura, presidente del Gobierno. El rey recorrió los barrios afectados y bajo la impresión por la magnitud de la catástrofe exclama: "Creía grande el desastre, pero no tanto. Esto es horrible". Después rezó un "tedeúm" en la Catedral y entregó 8.000 pesetas para la ciudad, y Maura, en nombre del Gobierno, otras 10.000.