Otra investigación incide en que la circulación atmosférica está más alterada en un mundo más cálido

Una nueva investigación incide en que la circulación atmosférica está más alterada en un mundo más cálido.
Es decir, aunque en términos globales la atmósfera es más templada que décadas atrás, se están detectando invasiones de aire frías y húmedas más intensas que antaño.
Lo hemos repetido muchas veces: el clima se está extremando, tal y como afirman muchos estudios que analizan la ocurrencia de olas de frío, de calor, sequías o los períodos húmedos anómalos.
Una circulación atmosférica más alterada
Este estudio ha sido publicado en el Bulletin of the American Meteorological Society de Estados Unidos y viene a decirnos que se han detectado enormes meandros en la corriente en chorro que llevan el aire polar hacia el sur.

De esta forma, se están registrando temporales fríos y/o húmedos, simultáneamente en extensas zonas de Norteamérica y Europa, que en ciertas ocasiones duran varias semanas.
Concretamente, estiman que dichas ondas atmosféricas han duplicado su frecuencia desde los años 1960.
¿Qué es la Corriente en Chorro?
El chorro polar lo componen ríos de vientos muy intensos que encontramos en capas superiores de la atmósfera.
Se forman como consecuencia de fuertes contrastes de temperaturas entre masas de aire de características muy distintas y que, básicamente, se manifiestan por fuertes contrastes frío/calor.

Aunque las corrientes en chorro podemos encontrarlas en diversas capas atmosféricas, las capas de referencia para su estudio son las de 300 y 250 hPa, entre 9 y 10 km. de altura en una atmósfera estándar.
También podemos identificarlas a nivel de 500 hPa (unos 5 o 6 km. de altura), pero este no es un nivel de referencia.
Más oscilaciones debido al calentamiento en el Ártico
A juicio de este grupo de investigadores estas oscilaciones de las que hablamos están aumentando en tamaño y frecuencia debido al rápido calentamiento en el Ártico, el cual está muy desproporcionado con respecto a las regiones más al sur lo que desestabiliza el sistema, creándose vientos que rompen la barrera norte–sur.
Si se dan ciertas condiciones, algunas de estas oscilaciones pueden amplificarse hasta el punto de convertirse en ondas simétricas que luego se fijan en todo el mundo.

Onda 4 y Onda 7
En un estudio de investigación anterior que data de 2019, este grupo de trabajo demostró que un patrón repetido de ondas de Rossby conocido como onda 7 (siete picos gigantes y siete valles coincidentes que abarcan todo el mundo) atrae aire cálido y seco desde los subtrópicos hasta las latitudes medias, lo que provoca olas de calor y sequías veraniegas simultáneas en partes predecibles de América del Norte, Europa y Asia.

Este trabajo de 2023 profundiza en lo que ocurre con el patrón invernal, conocido como onda 4 (a nivel mundial, cuatro picos y cuatro valles coincidentes) que tiende a quedarse fijo.
Cuando esto sucede, las posibilidades de frío extremo o humedad en la depresión se triplican. Pero, al mismo tiempo, pueden desarrollarse condiciones anormalmente cálidas o secas en las cimas en otras zonas del mismo hemisferio.

Un ejemplo reciente
El trabajo pone de ejemplo que la ocurrencia importante más reciente de la onda 4 provocó una ola de frío en febrero de 2021 en gran parte de Canadá, Estados Unidos e incluso el norte de México. Otro evento similar, aunque menos destructivo, provocó una ola de frío entre enero y febrero de 2019 en el este de Estados Unidos.

Al otro lado del Atlántico, se pone de manifiesto este patrón con el evento de enero–febrero de 2019 trajo temperaturas extremadamente bajas tanto en el sur de Francia como en Suecia.
En esas mismas fechas, al arrastrarse aire húmedo desde el Atlántico, se generaron precipitaciones e inundaciones extremas en muchas zonas de Europa central y oriental. Acontecimientos similares tuvieron lugar en Europa en 2013 y 2018.
Si hace 50 años, estas olas simultáneas se producían en promedio solo una vez cada invierno, actualmente, la tasa ha aumentado a dos veces al año.
La línea de inestabilidad de este estudio parece clara.
Por dar una pista que no manejan en estos estudios y puede ser un claro reflejo del comportamiento de la atmósfera en periodos largos puede consultarse la cartografía del Sistema Nacional de Cartografía de Zonas Inundables.
Los períodos de recurrencia de eventos cubren periodos de retorno de avenidas de 10 a 1000 años.
Es de suponer que estos eventos extremos de lluvias se deben a comportamientos también extremos de la dinámica atmosférica, como las no tan lejanas olas de frío, p.e 2001, donde vivo mato todos los olivos de la variedad arbequina y se tuvo que córtalos para receparlos.
No disiento del estudio intento aportar más datos y una mirada crítica.
Hay que ver como cambia el clima en unos años, y yo que pensaba que era cosas de siglos. La verdad, ya cansa.
Para aportar un poco más, añado este estudio del CSIC, usando como modelo el verano de 2022.
https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0169809523003289?via%3Dihub#bb0400