Imagen de Alta Resolución del satélite AQUA, 14:10 UTC, 16.10.10, restos del que fuera huracán OTTO, sobre Madeira

Imagen de Alta Resolución del satélite AQUA (sensor MODIS), 14:10 UTC, 16.10.10, restos de huracán OTTO en las inmediaciones de Madeira y Canarias.

 

16.10.10. Aunque impera la tranquilidad, en general, en la meteorología de todo el país, con algunas excepciones debido a nieblas, las primeras heladas con una cierta generalización, intervalos de viento algo intensos, u otros fenómenos similares a los mencionados, siempre hay algún elemento que destacar cerca de nosotros. En este caso hemos querido mostrar una imagen de alta resolución del satélite meteorológico AQUA (y su sensor MODIS), de la NASA, y centrada sobre los restos del que llegó a ser un huracán de categoría 1 en la escala de Saffir Simpson, el pasado día 8 del presente mes: OTTO (sigue).

 

Los restos del ciclón tropical han venido dejando algunas lluvias y vientos sobre la isla de Madeira, muy cerca de la cual se encontraba hoy, en el momento de ser captado por el satélite, a las 14:10 horas solares (las 16:10 horas en la Península y 15:10 horas en el archipiélago canario). También, quizás, responsable de algunas lluvias que se han venido registrando en puntos de Canarias. Se trata de una pequeña baja presión, remanente del ciclón tropical, que ha conseguido sobrevivir a las duras condiciones de cizalladura y temperaturas oceánicas frescas, pero manteniendo una circulación ciclónica bastante bien definida, aunque muy poca convección.

Podemos ver la imagen a mayor resolución (500 metros), pinchando en este enlace (atención, 2.5 megas, por lo que tardará unos segundos en descargarse).

Está previsto que esta baja presión remanente termine disipándose en las próximas horas, mientras se dirige a las aguas del Golfo de Cádiz, debido probablemente a las condiciones de estabilidad atmosférica, temperaturas oceánicas relativamente frescas y unas duras condiciones de cizalladura vertical del viento, que esta tarde era de alrededor de 70 nudos sobre la baja (el valor umbral para ser favorable es de 15 nudos). Por lo tanto, sus consecuencias sobre la Península deben ser nulas o, como mucho, de provocar la aparición de alguna nubosidad sin mayores consecuencias. Quizá, como mucho, algún chispeo puntual.