Tormenta tropical IBA frente a las costas de Brasil, Atlántico Sur. Imagen visible, satélite GOES-16. 24 de marzo de 2019.

Durante la tarde de ayer, el sistema de baja presión formado frente a las costas de Brasil (Atlántico Sur) a partir de la cola de un frente frío, adquiría la suficiente organización y convección para ser designada como tormenta tropical.

Nacía la tormenta tropical IBA, el primer ciclón tropical puro en esta cuenca oceánica desde el año 2010.

Los ciclones tropicales en el Atlántico Sur son poco frecuentes

A pesar de que el Atlántico Sur tiene un tamaño lo suficientemente grande, las condiciones necesarias para la ciclogénesis tropical rara vez suelen converger para la formación de un ciclón tropical.

Así pues, las zonas en que el océano está lo suficientemente cálido, suelen estar afectadas por ambientes hostiles en cuanto a cizalladura del viento. Además, suele haber ausencia de sistemas de baja presión que actúen de germen de estos desarrollos tropicales.

Si embargo, de vez en cuando, estas condiciones se dan al mismo tiempo, permitiendo el nacimiento de un ciclón. La temporada en esta cuenca oceánica podría establecerse entre diciembre y mayo del año siguiente, siendo marzo el mes en que su formación es más probable.

Normalmente, los ciclones subtropicales son más frecuentes. Y los ciclones tropicales que llegan a formarse, no alcanzan una intensidad destacable. Sin embargo, hay una excepción notable.

El huracán Catarina de 2004

Huracán catarina, satélite AQUA (sensor MODIS). Crédito: NASA.
El 26 de marzo de 2004, el satélite AQUA de la NASA sobrevoló el ciclón, obteniendo la espectacular imagen que vemos arriba.

Desde el punto de vista científico – meteorológico, el Atlántico Sur es una cuenca oceánica en la que los ciclones tropicales son un fenómeno inusual y, especialmente, los huracanes son un hecho excepcional.

Oficialmente, el huracán Catarina ha sido el primer huracán detectado en más de 30 años de observaciones continuas a través de satélites meteorológicos.

Si se han formado otros huracanes antes, no podemos saberlo; por lo tanto, tampoco es recomendable achacar este fenómeno al Cambio Climático, especialmente cuando hablamos de que este ciclón se formó en 2004, hace 15 años, casi exactamente (el aniversario es mañana mismo).

Huracán catarina, fotografiado desde la Estación Espacial Internacional, 27 marzo 2004. Crédito: NASA.

El huracán Catarina es un fenómeno completamente excepcional, porque consiguió intensificarse hasta alcanzar la categoría 2 en la escala de Saffir-Simpson. Un huracán muy bien desarrollado y estructurado, y que hizo impacto en el estado brasileño de Santa Catarina, del que obtuvo su nombre.

Tan excepcional fue, que pilló desprevenidas a prácticamente toda la comunidad meteorológica científica:

«Aunque es comúnmente conocido como Catarina, todos los nombres para esta tormenta son ‘extraoficiales’, ya que ninguna agencia meteorológica afiliada a la Organización Meteorológica Mundial que monitorizan huracanes le dio nombre. (Los nombres de los ciclones tropicales son predeterminados por un comité internacional de la Organización Meteorológica Mundial). También fue llamado Aldonça, y los nombres para sus avisos fueron 01T-ALPHA de la Oficina Meteorológica de Reino Unido, y 50L-NONAME desde el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, que lo mantiene fuera de la designación normal, que comienza con 1L para tormentas con nombre y usa 90L a 99L para posibles tormentas.»

Wikipedia.

La primera tormenta tropical en casi una década

Tormenta tropical IBA frente a las costas de Brasil, Atlántico Sur. Imagen visible, satélite GOES-16. 25 de marzo de 2019.

Aunque hoy la tormenta tropical Iba está sufriendo los efectos de la cizalladura vertical del viento, con la convección desplazada al este-sureste de su centro de circulación de niveles bajos, ayer estaba bien estructurada.

Tormenta tropical IBA en el Atlántico Sur…

Gepostet von Pedro C. Fernández am Montag, 25. März 2019

Su formación se produce tras casi una década sin que se haya producido el nacimiento de ningún ciclón tropical puro. Otros ciclones formados entre la tormenta tropical Anita de 2010, e Iba de este año, han sido de características subtropicales.

Tormenta tropical IBA frente a las costas de Brasil, Atlántico Sur. Trayectorias previstas por los ensembles del modelo GFS.

La tormenta tropical Iba lleva asociado un alto interés científico, más que de preocupación porque pueda producir daños en un hipotético impacto en tierra.

Aunque los modelos apuestan por una aproximación a la costa brasileña, parece que la opción más probable es que, después, se adentre en el oceáno, alejándose de tierra. Allí terminaría perdiendo su naturaleza tropical.

Además, aunque en días previos había modelos como GFS / NCEP que veían probable su intensificación hasta huracán débil, actualmente ninguno contempla esta opción.