04.10.12. El reciente temporal de lluvias torrenciales en el tercio Sur y Sudeste peninsular ha dejado muchas imágenes espectaculares en nuestras retinas. Fotografías y vídeos de pueblos y ciudades anegados, ríos desbordados, vehículos o animales arrastrados, puentes derribados… Pero también desde la órbita terrestre los efectos de las precipitaciones han sido visibles. El satélite Aqua de la NASA ha captado la presencia de ciertas zonas inundadas o la estela de los ríos y arroyos expulsando barro al mar, aunque esto no ha ocurrido en todos los casos. Veamos el porqué.
Javier Piñero F. nos ayuda a comprender qué vemos en las imágenes proporcionadas por el satélite meteorológico estadounidense. En este tema de nuestro foro de debate, puedes ver todas estas imágenes ampliadas.
Para apreciar los efectos de las riadas, lo mejor es visualizar la zona afectada a vista satelital antes de las inundaciones. Centrándonos en el cuadrante Sudeste de la Península Ibérica, comparando el estado del suelo el día 25 de septiembre (antes de las inundaciones) con el 1 de octubre (después) al diferencia es notoria:
Leyendo esta entrada en la que hablábamos de la sequía que nos hace unas jornadas, podemos observar la enorme diferencia que presenta la Península en una época húmeda y en otra seca.
Pero vayamos al caso actual. Si ampliamos la imagen en la zona de la Región de Murcia, observamos como incluso aparecen zonas inundadas, en tozo azul. Áreas más o menos extensas son detectadas por el sensor satelital:
Y si nos fijamos en las costas, también es patente el efecto de las lluvias, en este caso por los sedimentos arrojados al mar por los diversos arroyos y ríos de la zona.
En la costa mediterránea andaluza ocurrió algo similar. Llama la atención la estela que deja el río más caudaloso de la zona (el río Guadalhorce) que recoge las aguas de las riadas registradas desde los pantanos del complejo del Guadalhorce-Guadalteba hacia abajo, como las que ocurrieron en la zona de Cártama y Alora así parte de las lluvias torrenciales registradas en El Torcal de Antequera. Las lluvias registradas en Villanueva del Trabuco y del Rosario, vierten a dicho río pero aguas arriba de los pantanos.
Hacer notar que pese a la lluvia torrencial registrada en el Genal (Alpandeire, Pujerra, Reales…) no se ven sedimentos en la desembocadura del Guadiaro (de donde es afluente el Genal). Sin duda, el espeso e inigualable bosque de castaños, alcornoques y pinares de la zona, protegen la cuenca de aluviones de barro.
Río Vélez tampoco ofrece una estela llamativa. El embalse de La Viñuela cubre esta cuenca y tampoco se registraron precipitaciones importantes en la zona, algo similar a lo que ocurre con el Guadalfeo.
Los ríos almerienses sí que ofrecen una estela importante, sin duda, la poca vegetación de la zona y la torrencialidad marcan las desembocaduras de sus ríos.
Una última observación. El devastador incendio que tuvo lugar a finales de agosto en la provincia malagueña se dejaba ver desde el satélite Aqua así antes y después de las lluvias.
Sin duda alguna, la herida del incendio va siendo poco a poco curada por la incipiente vegetación, aunque no cabe duda de que tardarás decenas de años en volver a recobrar aquella zona su aspecto original.
Puedes ampliar esta información en este hilo de nuestro foro de debate.
Tú opinas