Meses atrás hablábamos en cazatormentas de la iniciativa de la OMM para crear un nuevo atlas de nubes online, digital, el cual sería la nueva referencia para la clasificación de todos tipos, especies y variedades de nubes tanto para los aficionados como para los profesionales de la meteorología.
Dicho atlas ya es una realidad y puedes consultarlo en la web de la Organización Meteorológica Mundial, donde encontrarás infografías explicativas que te ayudarán a identificar las nubes, imágenes con todos los tipos existentes, la nomenclatura que se usa para denominarlas. Y la gran novedad: la incorporación de 12 tipos de nubes. Os contamos cuáles son.
El Atlas de nubes
La clasificación general de las nubes está basada en la propuesta de nombres que realizó Luke Howard a principios del s. XIX, se pueden clasificar prácticamente todas las nubes que aparecen en el cielo, con la denominación básica a la que se le añade (si ha lugar) las características secundarias y terciarias, aunque no todos los géneros pueden contener a todas las especies ni todas las especies a todas las variedades.
Aproximadamente, el cielo es capaz de mostrar de acuerdo a las normas que rigen el Atlas de nubes unas 100 combinaciones para denominar a estas.
Concretamente, esa clasificación inicial contaba con cuenta diez géneros de nubes (clasificación básica), 14 especies (clasificación secundaria) y 9 variedades (clasificación terciaria).
12 nuevas nubes
Como sabéis, las nubes altas suelen formarse por encima de los 5 000 metros; las nubes medias aparecen entre los 2 000 y los 7 000 metros; y las nubes bajas a una altura máxima de 2 000 metros.
La mayoría de los nombres de nubes contienen prefijos y sufijos latinos que, al combinarse, dan una indicación del tipo de nube. Algunos de ellos son los siguientes:
- Alto: nivel medio (aunque altus significa alto en latín)
- Cirrus/cirro: plumoso, fleco
- Cumulus/cumulo: montón, colmo
- Nimbus/nimbo: portador de lluvia
- Stratus/strato: alargado, allanado y nivelado
Ahora, tras la última actualización realizada en 1987 la OMM ha decidido renovar el Atlas añadiendo las siguientes novedades.
Volutus y Flummen
El volutus o nube enrollada (término que en latín significa rodado), se utilizará para aquellas nubes que se formen en el seno de los géneros altocumulus y stratocumulus y describe una masa nubosa en forma de tubo horizontal, alargada y típicamente baja que parece enrollarse en un eje horizontal.
El atlas también incluye una nueva nube accesoria, denominada flumen o cola de castor. Suele aparecer asociada a fuertes tormentas en rotación conocidas como supercélulas.
Volutus
Flumen
Asperitas, Cavum, Cauda, Fluctus y Murus
Se han añadido cinco nuevos rasgos complementarios: asperitas, cavum, cauda (a menudo conocida como nube de cola o nube agujero), fluctus (generalmente conocida como «onda de Kelvin-Helmholz») y murus (conocida como «nube de muro»).
El más conocido de los rasgos complementarios es asperitas (sustantivo latín que significa aspereza), formación particular que se asemeja a la superficie rugosa del mar vista desde abajo y que ha inspirado al público en los últimos años.
De hecho, la Cloud Appreciation Society defendió que se utilizara una nueva clasificación para describir a las nubes que tenían esa apariencia. En el Atlas se incluye la fotografía ganadora del concurso organizado por la asociación Cloud Appreciation Society en relación con la nube asperitas.
Cavum
Asperitas
Murus
Fluctus
Cataractagenitus, Flammagenitus, Homogenitus, Silvagenitus y Homomutatus
El nuevo Atlas Internacional de Nubes también propone cinco nuevas «nubes especiales»: cataractagenitus, flammagenitus, homogenitus, silvagenitus y homomutatus.
El sufijo «genitus» indica que hay factores localizados que generan la formación o el crecimiento de nubes mientras que «mutatus» se añade cuando esos factores hacen que la nube mute a una forma distinta.
Silvagenitus
Homomutatus
Homogenitus
Flammagenitus
Cataractagenitus
Así, las que aparecen por encima de una catarata, se llamarán cataractagenitus. Las que surgen a raíz de un incendio, ahora se llaman flammagenitus. Lo mismo ocurre con las que se forman sobre un bosque: se llamarán silvagenitus.
Estas nubes especiales están influenciadas por las grandes cascadas, por el calor localizado de los incendios forestales, por la saturación del aire por encima de los bosques y por el ser humano. Así, el ejemplo más común de la especie «homogenitus» es contrails, esto es, estelas de condensación producidas por los gases de escape de los motores de las aeronaves.
De toda la vida,las estelas de condensación se han llamado «contrail cirrus»,no me gusta eso de «homomatus,suena raro y feo a la véz….
Por arriba y por abajo, todo lo tenemos contaminado, valga la rima para calificar la expansión humana y el deterioro de la naturaleza en todos los sentidos.
Lo triste de esta noticia es que se haya clasificado como nube lo que antes se consideraba simple y pura contaminación (me refiero sobre todo a las nubes «homomutatus» y «homogenitus»).
Esto es, hay que ver hasta qué punto el ser humano está modificando el medio ambiente, para que se tengan que clasificar como nubes y entrar a formar parte de lo «normal», lo que es totalmente artificial: nubes formadas por emisiones de actividades industriales y por emisiones de la aviación.
Además, la aviación, como produce nubes tipo cirro (ahora ya recogidas en el atlas) está agravando el cambio climático, tal y como se puede extraer de la siguiente noticia:
http://www.efe.com/efe/espana/sociedad/nubes-causadas-por-el-hombre-entran-primera-vez-en-atlas-internacional/10004-3216914
Es muy interesante lo que remarca Don Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología, en el siguiente inciso de la citada noticia: «Las nubes altas, por ejemplo los cirros, tienden a calentar el clima ya que no impiden la llegada de la radiación solar debido a su estructura fina, pero sí que actúan como una «manta» evitando que se escape parte del calor de la tierra y aumentando el efecto invernadero.»
Merece una profunda reflexión sobre lo que le estamos haciendo al planeta con nuestro estilo de vida.
Pero «homogenitus» no es una especie.
La traducción de la WMO de su página oficial del día meteorologico dice especie, pero es una incorrecta traducción.
Habéis hecho una traducción muy buena, la de la WMO es de pena, llama mama a la característica complementaria mamma. Y otras muchas barbaridades.
Gracias