Periódicamente nos llegan datos acerca del incremento de la temperatura global del Planeta. Los informes climáticos mensuales que compartimos con vosotros nos dicen que desde 1984 la temperatura media global de la Tierra ha estado siempre por encima de la media del s. XX… o que 14 de los 15 meses más cálidos desde 1880 han tenido lugar en lo que llevamos de siglo 21.
Pero a estos datos globales se les unen cada cierto tiempo registros particulares significativos. El último ejemplo nos llega desde la Antártida: en aquel rincón tan importante de nuestro Planeta la OMM acaba de validar varios datos de temperatura máxima.
Varias temperaturas altas extremas en la Antártida
Según ha informado un comité de expertos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) durante los últimos años se han registrado diversos valores excepcionales en la Antártida:
- La temperatura más alta en la “región de la Antártida” es decir, todas las tierras y hielos que se encuentran al sur del paralelo 60°S, se observó el 30 de enero de 1982 en la estación de investigación Signy, en la bahía Borge de la isla Signy, alcanzando un valor de 19,8 ºC.
- La temperatura más alta en el “continente antártico” o lo que es lo mismo, la masa continental principal y las islas adyacentes, se midió el 24 de marzo de 2015 en la base argentina de investigación Esperanza, situada en el extremo norte de la península antártica, registrándose un valor de 17,5 ºC.
- La temperatura más alta en la “meseta antártica” es decir, la zona con una altitud igual o superior a los 2.500 metros, se midió el 28 de diciembre de 1989 en la estación meteorológica automática (sitio D-80) situada en el interior de la costa Adélie, llegando a un valor de -7,0 ºC.
Y un récord a la baja
Por otra parte la OMM ha validado el conocido dato de la temperatura más baja, de -89,2 °C, jamás medida en el suelo, y no solo en la región de la Antártida sino también en el mundo entero, se registró el 21 de julio de 1983 en la estación de Vostok.
WMO verifies #Antarctica heat records, 19.8°C on Signy Isle (1982), 17.5°C at Esperanza (2015). Vostok retains coldest title −89.2°C (1983) pic.twitter.com/9HVyqogT2R
— WMO | OMM (@WMO) 2 de marzo de 2017
¿Qué es el comité de expertos?
Estos datos han sido validados tras varios años de análisis e investigación por un grupo de expertos de la OMM.
La Comisión de Climatología de la OMM mantiene un Archivo de fenómenos meteorológicos y climáticos extremos, que engloba información como las temperaturas máximas y mínimas y los récords de precipitación a escala mundial, el pedrisco más pesado, el período de sequía más prolongado, la ráfaga de viento más fuerte, el rayo más duradero y la mayor altura significativa de ola.
Pero en concreto, la verificación de estos tres valores extremos en la Antártida nos permite entender mejor los distintos regímenes climáticos de la región, en algunos casos de tipo fundamentalmente marítimo y en otros continental.
El Comité de Expertos tomó nota de que los tres récords se registraron en las estaciones coincidiendo con una afluencia de aire caliente. En las estaciones de Signy y Esperanza había un viento Foehn cálido, y en la estación D-80, merced a un cielo despejado y a la altitud, el calor del sol desempeñó un papel muy importante.
La Organización Meteorológica Mundial verifica las temperaturas máximas alcanzadas en la región de la Antártida https://t.co/4vG8mLsXxT pic.twitter.com/ISGq2Mo2xH
— WMO | OMM (@WMO) 1 de marzo de 2017
¿Cómo se verificaron estos récords?
Para el primer récord de temperatura, el Comité de Investigación se basó en la definición de la OMM y las Naciones Unidas (ONU) de la región de la Antártida (todas las tierras y hielos que se encuentran al sur del paralelo 60°S).
Para el segundo, tuvo en cuenta una definición comúnmente aceptada de la región de la Antártida, considerada como masa continental.
Y con el tercer récord, relativo a la meseta antártica (altitud igual o superior a los 2 500 metros), se aborda de manera completa la amplia gama de condiciones medioambientales que existen en la región de la Antártida.
Como es el caso de todas las evaluaciones de valores extremos (p. ej., temperatura, presión, viento, etc.) que realiza la OMM, estos solo se validan si se cuenta con datos de gran calidad que hayan sido señalados a la atención de la OMM por la comunidad geocientífica.
Es posible, y ciertamente probable, que puedan darse casos más extremos, y de hecho se den, en la región de la Antártida. No obstante, aquí se trata de casos de temperaturas máximas, realmente observadas, que se presentan a la OMM para su decisión.
Cuando se registren efectivamente fenómenos más extremos y se señalen a la atención de la OMM, podrán volver a realizarse evaluaciones de esos extremos.
¿Qué ocurre en la Antártida?
A juicio de la Organización Meteorológica Mundial es bastante probable que puedan darse, y de hecho se den, extremos más acusados en la región de la Antártida ahora y en los próximos años
Esta región del Planeta cuya superficie es de 14 millones de kilómetros cuadrados como sabéis se trata de un extenso territorio frío, ventoso y seco donde la temperatura media anual oscila entre -10 °C en la costa y -60 °C en las zonas más altas del interior.
Su inmenso manto de hielo tiene un grosor de hasta 4,8 km y contiene el 90% del agua dulce del mundo, que en caso de que se fundiera bastaría para elevar el nivel del mar en unos 60 metros.
La península antártica (cuyo extremo noroccidental se encuentra cerca de América del Sur) es una de las regiones del planeta que se está calentando a más velocidad, habiendo alcanzado casi los 3 ºC en los últimos 50 años.
A lo largo de ese período aproximadamente un 87% de los glaciares de la costa occidental de la península han retrocedido y en los últimos 12 años, muchos de ellos han experimentado un retroceso acelerado.
Las investigaciones de la OMM también sirven para mejorar la calidad de las observaciones gracias a la realización de análisis minuciosos de las prácticas de observación y a la selección de un equipo adecuado.
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