Imagen visible del gran huracán Blanca. Satélite AQUA (sensor MODIS), 3 junio 2015.

Imagen visible del gran huracán Blanca. Satélite AQUA (sensor MODIS), 3 junio 2015. Crédito: NASA.

Los misterios del gran huracán Blanca. Tan solo han transcurrido 20 días de la temporada de huracanes 2015 en el Pacífico Noreste y ya tenemos muchísimo de qué hablar, especialemente en lo que se refiere al gran huracán Blanca. ¿Quieres saber de qué se trata?

Antes de comenzar a revelar los secretos de Blanca, te recomendamos que tras la lectura de esta entrada, le eches un vistazo al seguimiento del huracán en nuestro foro de debate, en donde podrás ampliar toda la información aquí condensada.

Este ciclón tropical comenzó a formarse el pasado 1 de junio sobre aguas muy cálidas del Pacífico Noreste, bien alejado de México y de Centroamérica.

Tanto la temperatura de las aguas superficiales como las condiciones ambientales, eran idóneas para que el ciclón tropical se intensificara de una manera explosiva.

Tras evitar ceñirse al guión establecido por el Centro Nacional de Huracanes de Florida, que esperaba pronto una verdadera explosión de poder, esta comenzó a producirse durante la mañana del pasado miércoles. Así, en el centro de una inmensa y activa masa de tormentas en rotación, surgió un pequeño ojo que en la jerga profesional y en inglés recibe el nombre de «pinhole eye«.

La explosiva intensificación de Blanca estaba servida. Y tanto fue así que consiguió, en 24 horas, aumentar sus vientos en 60 KT para pasar de la categoría 1 a la 4 (escala de Saffir Simpson) y profundizarse 51 hPa (recordemos que para la latitud a la que se encuentra la Península Ibérica, los procesos de ciclogénesis explosiva implican caídas de presión de al menos 24 hPa en 24 horas). Vamos, todo un señor proceso de Rápida Intensificación.

Además, si tenemos en cuenta a su predecesor Andres, que también alcanzó la categoría 4, tenemos que Blanca se convirtió en el 2º huracán mayor más temprano desde que se tienen registros (año 1950 al menos). Es decir, es la primera vez que se forman dos huracanes mayores (categoría 3 o superior) tan pronto en la temporada, desde que se tienen registros (nuevo récord).

Sin embargo, tras tal exhibición de poder, los meteorólogos esperaban que el proceso continuase para dar lugar al nacimiento de todo un monstruo de categoría 5, cosa que nunca llegaría a ocurrir ¿Qué pasó entonces?

Pues pasó algo con lo que no contaban y que se aprecia muy bien en la siguiente figura:

Temperatura de las aguas superficiales del Pacífico Noreste, 4 junio 2015 06 UTC.

Temperatura de las aguas superficiales del Pacífico Noreste, 4 junio 2015 06 UTC.

Blanca, durante toda su vida hasta entonces, a penas se había movido del mismo sitio. Y como los huracanes tienen la singular capacidad de inducir corrientes en la zona del océano sobre la que se encuentran, de tal manera que aguas más profundas son estimuladas a ascender, el coloso indujo sobre el océano un fenómeno que en inglés se conoce como upwelling y que en castellano se conoce como afloramiento.

Es decir, que la lentitud de desplazamiento del poderoso huracán Blanca había tenido como consecuencia el afloramiento de aguas sensiblemente más frías; Blanca estaba esquilmando los recursos energéticos que tenía a su disposición.

En la figura superior puede identificarse el afloramiento, representado como esa pequeña mancha de colores fríos justo en medio de una enorme área con aguas muy cálidas.

Este fenómeno evitó que Blanca se convirtiera en un huracán monstruoso que quizás hubiese sido capaz de batir algún récord más, ya que el afloramiento de aguas frías detuvo el proceso de intensificación y, al coincidir con un ciclo de reemplazamiento del ojo, llevó a un proceso de debilitamiento, para bajar a la intensidad de 85 KT de vientos sostenidos y la categoría 2.

El huracán se dirige hacia el Cabo San Lucas, y aún tiene oportunidad para recuperar fuerzas, antes de que en su aproximación a esta zona de Baja California Sur, se debilite ya definitivamente, tocando tierra como tormenta tropical.

Continuaremos con su seguimiento, ya que Blanca aún no ha dicho su última palabra, a pesar de que sus secretos ya han sido desvelados.