Los vientos alisios desaceleran el calentamiento global del Planeta

El fortalecimiento de los vientos alisios en el Océano Pacífico occidental sería la causa de la desaceleración del calentamiento global de la Tierra. Así lo afirma un estudio de investigación publicado en la revista científica Nature Climate Change.

La evidencia de que el ritmo de crecimiento de la temperatura del Planeta se ha frenado en los últimos años, podría tener por primera vez una explicación plausible gracias a las investigaciones del grupo de trabajo del Centro ARC de Excelencia para las Ciencias del Clima, de la Universidad de Nueva Gales del Sur.

¿Qué mecanismo produce la desaceleración del calentamiento global?

Según se indica en el informe, la intensificación de los vientos en aquella región del globo terráqueo habría favorecido una mayor circulación en el Océano Pacífico, provocando a su vez que una mayor cantidad de calor se transfiera de la atmósfera al agua.

Es decir, al existir un flujo de corrientes marinas más dinámicas e intensas, la tasa de intercambio energético entre atmósfera y superficie del océano es más alta, facilitando el trasvase del calor de la troposfera al Pacífico.

Interrupción del calentamiento global

El grupo de trabajo ha constatado que en los 13 últimos años se ha producido una amortiguación del calentamiento global del Planeta, lo cual podría tener su origen en la intensificación de los vientos en esa zona del Pacífico.

El fortalecimiento de las corrientes oceánicas del Pacífico, permitirían que de forma continua las aguas más frías afloren a la superficie, mientras que las más cálidas bajen a niveles más profundos.

¿Qué perspectiva vislumbran los científicos?

Este mecanismo, que arrancó en la década de los años 1990 y que continúa en la actualidad, se desconoce si podría continuar activo muchos años más. Los modelos meteorológicos a gran escala aún no son capaces de prever la evolución de un proceso así.

Pero lo cierto es que el grupo de trabajo liderado por Matthew England no cree que esta situación dure mucho tiempo; con el paso de los años el flujo de vientos debe volver a ser más débil por lo que no solo dejaría de transferirse tanto calor de la atmósfera al océano sino que incluso el proceso se podría revertir.

Referencia:

http://www.nature.com/nclimate/journal/vaop/ncurrent/full/nclimate2106.html