Panel con las situaciones «clave» planteadas por el modelo europeo IFS/ECMWF en los próximos días (salida de las 00 UTC, 23 de enero de 2017).

La evolución atmosférica de los próximos días, sugerida por los principales modelos meteorológicos GFS/NCEP e IFS/ECMWF, sigue manteniendo un gran interés: primero por posibles nevadas en cotas muy bajas en Cataluña en 60 horas; después, por una expansión polar marítima con frente frío que regaría a todo el país (escasamente en Canarias). Lo analizamos con detalle a continuación.

En el foro de debate acabamos de dejar dispuesto un nuevo hilo de seguimiento donde daremos cobertura a esta posible evolución de la atmósfera. Las últimas previsiones, análisis de modelos, fotos y opiniones diversas tendrán cabida, como siempre, y tú también puedes participar.

Tomando como referencia el panel que encabeza la entrada, podemos ver las dos situaciones previstas muy bien diferenciadas. Cabe destacar al respecto que el modelo GFS prácticamente coincide con el europeo IFS, que es el que hemos elegido para crear ese panel.

En esta animación de la evolución de las temperaturas a 850 hPa se puede observar muy bien ambas situaciones en conjunto.

Y en esta otra, la evolución de los acumulados de nieve, apreciándose el rastro nivoso que irá dejando la baja desprendida en altura hasta Cataluña, y las nevadas posteriores por la llegada del frente frío y la descarga fría posterior.

Nevadas en cotas muy bajas en Cataluña.

Tomemos como referencia las dos animaciones anteriores.

Este fenómeno puede producirse como resultado del curioso desprendimiento de una bolsa de aire frío en todos los niveles atmosféricos desde el Mar del Norte.

Una pequeña baja en altura que llegaría hasta Cataluña, pasando primero por Alemania y luego por Francia, estando acompañada de aire muy frío en capas bajas, con valores de hasta -5ºC a 850 hPa.

Aunque la baja parece que no será capaz de inestabilizar de forma marcada la atmósfera, su presencia combinada con un flujo de vientos de levante con cierto contenido de humedad podría provocar nevadas en cotas muy bajas, preferentemente en las zonas más cercanas a la costa de toda la región.

A priori, no deberían ser nevadas copiosas; pero no bajaremos la guardia, por si acaso. Como decíamos, no parece una situación de gran inestabilidad, pero si el flujo de levante fuese más marcado de lo previsto por el modelo, las precipitaciones podrían ser más cuantiosas.

Frente frío y desalojo de masas de aire polar marítimo.

Como en el apartado anterior, será necesario volver a echar un vistazo a las dos animaciones anteriores.

Gracias al bloqueo anticiclónico que tenderá a persistir en el norte de Europa, el cual se identifica muy bien en las anomalías de altura geopotencial de 500 hPa, y las de temperatura a 850 hPa, previstas para el 28 de enero, las bajas presiones podrán alcanzar de lleno a nuestro país.

Si se cumple la previsión en los términos descritos, lo harán, probablemente, en forma de un frente frío que podrá dejar lluvias generalizadas. Lluvias que servirán para paliar un poco la sequía que se vive en el cuadrante noroeste de la Península.

Además, como la masa de aire que llegará detrás del frente será polar marítima, la nieve caerá en los principales sistemas montañosos.

Esta segunda fase de la evolución atmosférica, por ser más lejana en el tiempo, es menos fiable. Así, podría haber variaciones en los pronósticos, según se aproximen las fechas. Publicaremos actualizaciones sobre esta entrada inicial.