La primavera fue muy seca mientras que respecto a las temperaturas fue cálida

La primavera meteorológica (el trimestre marzo-mayo) fue la más seca en España de los últimos 15 años.

Respecto a las temperaturas, el último informe de AEMET destaca que fue más cálida de lo normal.

Curiosamente, al llegar junio, las precipitaciones sí están siendo más generosas en muchos puntos de la Península Ibérica.

La primavera fue la más seca en los últimos 15 años

Según la red de observatorios de AEMET las precipitaciones estuvieron un 33% por debajo del valor normal en el conjunto del país.

La excepción: la estación fue lluviosa en el sureste peninsular.

Se acumularon 114,5 l/m2 a lo largo del trimestre en el conjunto de la España peninsular, un valor que supone el 67% del valor normal del período de referencia.

La primavera fue seca o muy seca sobre todo en el tercio norte y mitad occidental peninsular, así como en Canarias.

Llegó a ser extremadamente seca en el este del País Vasco, Navarra y noroeste de Huesca.

Muy húmeda en el sureste peninsular

Por el contrario, las precipitaciones fueron superiores a los valores normales, llegando incluso a duplicarlos, en el sur de la Comunidad Valenciana, Región de Murcia y extremo oriental de Andalucía.

En Baleares tuvo un carácter normal.

Las lluvias fueron especialmente escasas a lo largo del mes de marzo, que fue el más seco del siglo XXI, cuando llovió poco más de la tercera parte de lo normal.

Abril estuvo en torno al promedio, aunque con grandes contrastes entre las regiones y mayo volvió a ser seco en casi toda España, salvo en el extremo sudoriental.

Una primavera muy soleada

Fue una primavera soleada en la mayor parte de España, excepto en las regiones mediterráneas.

A Coruña y Pontevedra disfrutaron de más horas de sol que Castellón y Valencia respectivamente.

Una estación cálida

La temperatura media de la primavera fue, en el conjunto de la España peninsular, de 12,5ºC.

Un valor que por tanto fue 0,4ºC superior al promedio del período de referencia 1981-2010.

No fue una primavera excesivamente cálida

Con estos datos, se trató de la vigésima primavera más cálida desde el inicio de la serie, en 1961, aunque a lo largo del siglo XXI se han registrado once primaveras con mayor temperatura.

No en vano, ocho de las diez primaveras más cálidas en España han tenido lugar en este siglo.