Llegada de una galerna a las playas de Zarautz (Guipúzcoa).
 
02.11.09. Por fin el otoño se está poniendo de manifiesto en lo meteorológico en la Península Ibérica, con un repentino cambio del tiempo en muchas regiones de la Península. Pero más se está notando, al menos de momento, en las temperaturas, que en las lluvias. Ya que lo que más se está notando es un descenso acusado de la sensación térmica, con la retirada de la dorsal anticiclónica y la masa de aire cálido asociada, siendo reemplazada por otras de latitudes más altas, y más frescas. Sin embargo, siempre hay excepciones porque esta componente del viento, sobre todo en la fachada mediterránea, se aterrala y hace que las temperaturas suban bruscamente (sigue).

Diferencias de hasta 10ºC e incluso más en algunos lugares, es la variación que están sufriendo los valores máximos de las temperaturas en muchos puntos del noroeste peninsular, según los mapas de la Agencia Estatal de Meteorología. Sin embargo, las lluvias sólo van a favorecer eficazmente a las regiones situadas más al noroeste y al norte, en toda la Península. En el resto, será el viento el factor predominante, al menos en los días iniciales de este episodio, pudiendo soplar con mucha fuerza, y motivando el establecimiento de alertas.
 
Esperemos que la situación progrese de tal manera que la lluvia llegue a todas las regiones de forma abundante, porque el arranque del otoño está siendo muy desigual y, en general, muy seco.
 
En el foro de debate de la web hay abierto ya un hilo de seguimiento de las condiciones meteorológicas que vaya trayendo asociados este cambio tan repentino de las condiciones meteorológicas.
 
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