Altura geopotencial de 500 hPa y anomalías correspondientes. Previsión del modelo GFS para el 30 de abril de 2016, 12 UTC.

La atmósfera va a tender a inestabilizarse con la llegada del fin de semana, y para despedir un mes de abril de 2016 que, en algunos lugares, sí que ha sido de aguas mil. Por lo tanto, se espera el desarrollo de tormentas durante la jornada del sábado.

Esta inestabilidad va a estar motivada por la conjunción positiva de varios ingredientes, comenzando por el paso de una vaguada planetaria en niveles altos, y que se distingue fácilmente en la figura superior, en el campo de altura geopotencial de 500 hPa.

En capas inferiores, y debido al efecto de un anticiclón atlántico, habrá un marcado flujo de vientos de levante que aportarán humedad.

CAPE y LI previstos para el sábado 30 de abril de 2016, 12 UTC, por el modelo GFS.

Reflejo de esta inestabilidad es esta figura, que muestra los valores de CAPE y LI previstos por el modelo GFS para el sábado. CAPE expresa la energía disponible para la convección y el índice LI es expresión de la estabilidad atmosférica siendo los valores negativos los que indican inestabilidad, tanto más cuanto más negativos.

Precipitaciones en las 6 horas anteriores a las de la previsión, de origen convectivo. Previsión del modelo GFS para el 30 de abril de 2016, 18 UTC.

Por fin, como fruto de esta inestabilidad, se formarán tormentas que dejarán chubascos irregularmente repartidos por el interior de la mitad sur y también en zonas de montaña del centro y noreste peninsulares.

Aunque no se han adjuntado mapas al respecto, los datos consultados indican que no existen condiciones favorables para que las tormentas se organicen. Sin embargo, de forma local, sí podrían dejar alguna granizada, además de chubascos intensos.

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