Panel comparativo entre previsiones del modelo europeo IFS y el americano GFS, para los días 7 y 9 de abril de 2017.

Con la Semana Santa 2017 a la vuelta de la esquina, y tras muchas jornadas observando las tendencias dibujadas por los dos grandes modelos meteorológicos, el europeo IFS/ECMWF y el americano GFS/NCEP, ya podemos ofrecer algunas pistas claras del tiempo que tendremos, al menos en el arranque de estas fechas tan señaladas.

Si nos habéis estado siguiendo en el foro de debate, en el hilo de análisis de modelos y pronósticos meteorológicos para la Semana Santa 2017, recordaréis que se ha estado trabajando sobre una insistente tendencia a la formación de una Depresión Aislada en Niveles Altos sobre la Península de cara al Viernes de Dolores, 7 de abril.

Pues bien, esta tendencia parece bien consolidada, con unanimidad entre los dos grandes (ver el panel que encabeza la entrada).

También parece muy probable su influencia sobre el fin de semana posterior, que daría el pistoletazo de salida a la Semana Santa. Así, en la reintegración de esta baja en altura en la Corriente General del Oeste, condicionaría el tiempo durante estas dos jornadas.

A este respecto, cabe fijarse en cómo las líneas isóbaras están muy separadas para el día 9, al oeste de la Península, lo que es indicativo de incertidumbre.

Precipitación acumulada en 24 horas, prevista por el modelo americano GFS para el Domingo de Ramos, 9 de abril de 2017, 00 UTC.

La reintegración de la baja en altura que acabamos de describir daría origen a chubascos irregulares, preferentemente por el interior y en horas vespertinas. Ese tipo de situaciones que obliga a estar pendientes de la sección de radares meteorológicos de la web de la Agencia Estatal de Meteorología, pero que al final permite que muchas localidades puedan disfrutar de sus Procesiones con normalidad.

Anomalías de temperatura al nivel de 850 hPa. Previsión del modelo europeo IFS para el Domingo de Ramos, 9 de abril de 2017, 00 UTC.

Además, casi se puede asegurar que las temperaturas están en valores normales o por encima de lo que cabría esperar para la época del año, durante las primeras jornadas.

Algunas conclusiones.

Aunque es imposible detallar en qué lugares podría llover con esta situación, lo que sí podemos decir con seguridad es que NO se tratará una situación de inestabilidad generalizada, que sería fácil de predecir, sino una situación de chubascos muy irregulares en intensidad y distribución.

Tras este inicio con una cierta inestabilidad, la tendencia es a que la dorsal anticiclónica gane terreno, estabilizando la atmósfera especialmente por el sur peninsular. No obstante, posteriormente se espera que la inestabilidad se vaya extendiendo desde el noroeste, pero esto ya es una tendencia que habrá que ir definiendo en los próximos días.

En Canarias, con esta evolución descrita, no parece que vaya a haber grandes inconvenientes meteorológicos, aunque los alisios podrían dejar algunas lluvias débiles en la cara norte de las islas coincidiendo con la leve inestabilidad en la Península. Posteriormente habrá que ir vigilando la progresión descrita en el párrafo anterior, porque podría provocar un incremento en estas lluvias asociadas a un alisio más humedo.