Estado de la Estratosfera: calentamiento súbito y perturbación del vórtice polar

Toca echar un vistazo al estado de las teleconexiones debido a que en la Estratosfera se están produciendo cambios significativos que podrían tener repercusiones más abajo, en la Troposfera, en la dinámica atmosférica que nos afecta, en un plazo de unas 2 o 3 semanas. Y decimos «podrían» porque esa relación causa-efecto entre estos dos estratos atmosféricos no está demostrada al cien por cien. Vamos a verlo con detalle.

Vamos a comenzar dejando dos puntos de referencia muy importantes: el seguimiento del estado del Vórtice Polar Estratosférico, VPE, en nuestro foro de debate; y nuestra última noticia que publicamos al respecto, de finales de noviembre de 2016, porque explica con más detalle qué es el vórtice polar y las consecuencias de su perturbación.

En la figura superior se muestra dos variables para el nivel de 10 hPa (Estratosfera):

• La temperatura, en colores.
• Los flujos de viento, en líneas.

En ese análisis se observan varios fenómenos: la formación de un dipolo, con una circulación ciclónica con centro sobre el Mar del Norte; y una circulación anticiclónica con centro sobre Canadá. Por otro lado, también se observa una zona caliente tomando posiciones dentro del Círculo Polar Ártico.

Pues bien, está previsto que este calentamiento súbito estratosférico, CSE, alcance su momento álgido en unos días, provocando un desplazamiento del VPE hacia posiciones más al sur de las que ocupa habitualmente.

La evolución de la temperatura media zona entre los 65ºN y los 90ºN muestra cómo ya está subiendo, colocándose por encima de la media 1979 – 2015 representada en una línea de puntos de color verde.

Temperatures at North Pole in stratosphere are predicted to go from record #cold to to possibly record #warm next week. Seems to be a #trend pic.twitter.com/FIyE0aJN2P

— Judah Cohen (@judah47) 25 de enero de 2017

ECMWF model predicting a major mid-winter #warming. Not sure how significant it’s to the weather but will make a diff if it is studied later pic.twitter.com/9i13x2xNbM

— Judah Cohen (@judah47) 25 de enero de 2017

Sudden stratospheric warming episode will weaken vortex by displacement, but still no signs of split. pic.twitter.com/z51TEQGx3w

— Michael Ventrice (@MJVentrice) 27 de enero de 2017

Sucede que este evento de CSE no parece que vaya a ser un evento mayor. Es decir, un evento que consiga debilitar al VPE de forma significativa hasta hacerlo desaparecer, produciéndose una reversión de los vientos zonales. Hay diversos estudios científicos que relacionan ese cambio de sentido de los vientos zonales estratosféricos con un gran debilitamiento del Chorro Polar Troposférico. Lo cual, a su vez, se relaciona con profundas expansiones de masas de aire ártico hacia latitudes medias, formaciones de notables bloqueos atmosféricos con profundos desajustes atmosféricos en buena parte del Hemisferio Norte.

Como ya hemos explicado en innumerables ocasiones, es lo que ocurrió durante el invierno de 2009-2010, y que tuvo como consecuencia uno de los inviernos más húmedos en España desde que se tienen registros, por el paso continuado de profundas borrascas con frentes muy activos.

Tal como prevé el modelo GFS, no parece que este vaya a ser el caso. Al nivel de 10 hPa se observa una tendencia al movimiento anticiclónico de los vientos, pero no es homogéneo.

¿Tendrá consecuencias en el patrón meteorológico que nos interesa en Europa a medio plazo? Puede ser. Desde luego es un elemento que suma, no resta. Es decir, teniendo en cuenta que a nivel troposférico todavía persisten las anomalías positivas de temperatura en el Ártico, y que se están produciendo estos cambios en la Estratosfera, la tendencia más probable es hacia la de un tiempo variable durante el mes de febrero.

Lo vamos a seguir en el seguimiento de modelos meteorológicos.