El Niño vuelve. En un par de meses, a partir de febrero de 2019, se debe de iniciar un nuevo ciclo climático que podría alargarse al menos hasta el próximo verano si bien, todo parece indicar, que este evento será más débil que el del histórico de 2015-16.

Como ocurriera entonces, El Niño contribuirá a que la temperatura global del Planeta aumente, por lo que esos próximos meses podría llegar a superarse, a nivel general, algún récord histórico de temperatura en el Planeta.

Probabilidad entre el 75 y 80%

Los últimos pronósticos indican que la probabilidad de que se produzca un episodio de El Niño a partir de febrero de 2019 oscila entre el 75 y el 80 %.

Actualmente, la temperatura superficial del mar ya se encuentra en niveles correspondientes a un episodio débil de El Niño en parte del Pacífico tropical, pero aún no se identifican los distintos parámetros atmosféricos asociados que confirmen la llegada oficial del evento.

Síntomas evidentes desde octubre

Desde octubre de 2018, según informa la OMM, la temperatura superficial del mar en las partes oriental y central del Pacífico tropical se encuentra en niveles correspondientes a un episodio débil de El Niño, aunque aún no se notan sus consecuencias en la atmósfera.

Una vez de que eso ocurra plenamente en febrero, la probabilidad de que se mantenga El Niño hasta abril de 2019 es de aproximadamente del 60 %.

Intensidad débil a moderada

Respecto a su intensidad, los modelos climáticos apuestan por un episodio débil, a lo sumo moderado, de forma que la temperatura superficial del mar alcanzará valores máximos comprendidos entre 0,8 y 1,2 ºC por encima de la media.

Existe una probabilidad pequeña de que este ciclo sea fuerte, algo que se traduciría en un aumento de la temperatura superficial del mar en la parte oriental y central del Pacífico tropical de al menos 1,5 ºC por encima de la media.

¿Qué es el Niño?

Como sabéis, el ciclo climático de el Niño se trata de la aparición de una irrupción ocasional de aguas superficiales cálidas, en el Pacífico junto a las costas de Perú y Ecuador, debido a inestabilidades en de la presión atmosférica entre las zonas Oriental y Occidental del océano cercanas a la línea del Ecuador.

Consecuencias para el clima

El Niño se trata de un fenómeno que ejerce una gran influencia en las condiciones meteorológicas y climáticas de numerosas partes del mundo.

Veamos, a continuación, cómo afectaría este evento climático planetario a las condiciones meteorológicas de los diferentes continentes.

Europa

Para los expertos en el tema, los años con un Niño intenso se caracterizan en Europa porque se dan inviernos muy fríos, especialmente en el Este del continente y Rusia.

Dos buenos ejemplos son los de 1812 y 1941, en los que tuvieron lugar dos derrotas históricas: las de Napoleón y Hitler con un duro invierno por medio…

Norteamérica

Puesto que El Niño desplaza la corriente en chorro subtropical que normalmente pasa por Centroamérica hacia el Norte, esto hace que se produzcan inviernos más lluviosos de lo habitual en el Sur.

En cambio, hacia el Norte los inviernos suelen ser más templados.

Sudamérica

La franja que va desde el Norte de Chile a Ecuador seguramente sea una de las zonas del Planeta que experimenta un cambio más importante de las condiciones climatológicas.

Con un Niño intenso las lluvias suelen ser muy abundantes y el riesgo de inundaciones está latente toda la temporada.

También pueden registrarse fuertes lluvias al Sur de Brasil o al Norte de Argentina. En cambio, al Nordeste de Brasil, es de esperar un tiempo extremadamente seco.

Asia

El enfriamiento del Océano en esa zona hace que países como Filipinas, Tailandia o Indonesia sufran sequías extremas.

África

En este continente es de esperar que las lluvias sean intensas en zonas áridas, como el África subsahariana, invirtiéndose la tendencia en zonas húmedas como Madagascar y Sudáfrica.

Los sistemas tropicales

Por último, reseñar que la temporada de huracanes suele ser muy débil en el Atlántico en temporadas con un Niño intenso, mientras que se activa enormemente en el Pacífico Oriental.